Las novedades en alimentación que más interesan a los españoles son los productos bajos en azúcares y grasas, así como los ecológicos y libres de conservantes. Aunque consideran que este tipo artículos son caros, el 49,4% acaban por probarlos. La demanda de innovación alimentaria crece y lo hará cada vez más en los próximos años.
La mayoría de los consumidores españoles presta atención a los productos novedosos cuando hace la compra, especialmente los jóvenes de entre 25 y 39 años.
En general, solo el 18,9% de los compradores decide adquirir las innovaciones nada más aparecer en el mercado, y un 31,7% se muestra escéptico ante las cualidades de los alimentos que llevan la etiqueta de saludables o ecológicos, según un estudio realizado por la Dirección General de Industria Alimentaria sobre la actitud de los españoles ante los alimentos innovadores, que fue presentado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación el pasado 11 de marzo en Madrid.
La mayoría de los encuestados compra este tipo de productos en sus tiendas habituales. La curiosidad por la novedad y la información que llega por el boca a boca son los dos desencadenantes principales de la decisión de compra. Tanto mujeres y hombres, como jóvenes y mayores coinciden en señalar que se trata de productos caros.
Los platos preparados y los lácteos son las dos categorías que los consumidores perciben como más innovadoras. Y lo que más les atrae en este sentido es que sean alimentos sanos. Los productos sin gluten y los enriquecidos con vitaminas, minerales, omega, etc. ya no representan una novedad para los españoles.
Las mujeres están más interesadas en los alimentos innovadores que los hombres, y por edad son los consumidores con edades entre 40 y 55 años los más proclives a comprar productos ecológicos y bajos en azúcares y grasas.
Sostenibilidad holística
En su informe Tendencias globales de alimentos y bebidas para 2019, la consultora de inteligencia de mercado Mintel, ha detectado las que son las grandes inquietudes de los consumidores de todo el mundo relacionadas con este sector tan determinante en el día a día de los ciudadanos.
En primer lugar, el concepto de sostenibilidad se extiende hasta abarcar todo el ciclo de vida del producto: desde la obtención de la materia prima, hasta el diseño del packaging, pasando por la presentación del producto, el reciclaje y la reutilización. Un movimiento hacia la economía circular, cuyo fundamento es extraer el máximo de utilidad de los recursos, recobrando los materiales sobrantes para su tratamiento y uso posterior.
La preocupación por el uso masivo de plástico tiene también un impacto directo sobre la industria de la Alimentación y las Bebidas. Gobiernos, industria y sectores del packaging están comprometiéndose en la circularidad de los materiales de empaquetado, facilitando el reciclaje en las próximas décadas. Algunas compañías ya han comenzado a utilizar materiales altamente sostenibles y reciclables como el tereftalato de polietileno.
La necesidad de frenar la cantidad ingente de alimentos que acaban en la basura también está llevando a algunas marcas a implementar acciones. La cadena retail Tesco, por ejemplo, lanzó el año pasado una línea de zumos de frutas, Waste Not, elaborados con frutas y vegetales frescos de “aspecto feo”, que usualmente se desechan para el consumo.
‘Skingestibles’
La industria de Alimentación y Bebidas tendrá un papel cada vez más determinante en dar respuesta a la creciente preocupación de los consumidores por asegurarse un envejecimiento lo más sano posible. En este sentido, la consultora recomienda seguir los pasos de las marcas de belleza y desarrollar productos que ayuden a la gente a verse y sentirse mejor. Innovaciones alimentarias que contribuyan a reforzar la salud ósea, cerebral, el sistema inmunitario o la vista, especialmente importante en una era en la pasamos buena parte del día mirando pantallas.
Se espera, pues, un incremento mayor de las gamas de alimentos enriquecidos con vitaminas, minerales y otros ingredientes, así como de la investigación en desarrollo de productos con fines médicos y fáciles de consumir dirigidos a los consumidores senior. También se consolidará la presencia de productos con efectos estéticos, los denominados skingestibles: alimentos y bebidas con altos contenidos de biotina, aloe vera, coenzima Q10, antioxidantes, colágeno, vitamina C, etc.
Junto a las exigencias anteriores, el consumidor demanda soluciones de alimentación y bebida que le permita ganar algo de tiempo en su complicada agenda diaria: snacks, desayunos para llevar, cenas listas para consumir, etc. Una necesidad que ya están satisfaciendo propuestas retail como la de Amazon Go, que ofrece comida fresca cocinada, platos preparados y meal kits premium a una nueva generación obsesionada por la comida, debido a la influencia de los cooking shows televisivos, pero que no dispone de tiempo ni de habilidades para cocinar.
TOP 10 SUPERALIMENTOS
Existen referencias sobre ellos desde hace miles de años. Muchos pueblos indígenas los han utilizado históricamente para sanar cuerpo y mente. Pero ahora su consumo se ha popularizado entre la población, cada día más preocupada por su salud.
Según explica Sònia Cibrián, nutricionista del chat médico MediQuo, “no hay una definición clara de los que es un superalimento, pero nutricionalmente suelen ser interesantes porque concentran grandes cantidades de vitaminas, minerales y antioxidantes. Sus propiedades curativas o para mejorar la salud no son siempre reales. Muchos de ellos, además, son de procedencia exótica y su popularidad es resultado de potentes campañas de marketing.
Algunos de los superalimentos que más de moda están forman parte de la dieta habitual de los consumidores españoles, pero la mayoría son poco conocidos. Según Cibriàn, en el Top10 de estos alimentos con presuntas propiedades curativas, además de nutricionales, están:
TEXTO ANA EGIDO
