La declaración del estado de alarma y el consiguiente confinamiento en múltiples países a causa de la pandemia de coronavirus ha impactado en las cuentas de resultados del primer trimestre de Netflix. La plataforma OTT ha logrado aumentar un 22,8% el número de suscriptores y ya alcanza los 183 millones de usuarios. Un crecimiento en suscripciones que también ha impulsado el beneficio hasta los 709 millones, y ello a falta de ingresos por publicidad.
En los tres primeros meses del ejercicio 2020, Netflix ha traído buenas noticias a los inversores. Ya son 183 millones los usuarios suscritos a la plataforma, que en el primer trimestre han dejado a la compañía una facturación de 5.768 millones de dólares y un beneficio de 709 millones, continuando así la tendencia ascendente de 2019.
La situación excepcional vivida a causa de la pandemia se ha reflejado, no obstante, en el flujo de caja de la compañía destinado a operaciones, en positivo por primera vez. Con 162 millones de dólares en efectivo, la plataforma lo atribuye a la paralización de las producciones, que se suma a la mejora percibida a finales de 2019 en el margen operativo y en los beneficios.
Aún así, aseguran que esta liquidez se invertirá en la producción de nuevo contenido, por lo que estiman que el flujo de caja se sitúe en 1.000 millones de dólares en negativo a finales de este año. Una cifra, no obstante, inferior a lo reflejado en el cuarto trimestre de 2019, cuando se posicionó en los 3.300 millones en negativo.
A 31 de marzo, Netflix dispone, en total, de un efectivo de 5.178 millones de dólares, cuantía suficiente, ha subrayado a los inversores, para contar con liquidez durante más de 12 meses. “Nuestra estrategia de financiación no ha cambiado, nuestro plan actual es continuar usando deuda para financiar nuestras necesidades de inversión”, han destacado.
Publicidad en Netflix
Una mayor competencia en el mercado puede llevar a la plataforma, sin embargo, a buscar nuevas vías de ingresos y ayudar a financiar, así, sus producciones. En opinión de Natalia Papiol, directora general en España de The Trade Desk, “si Netflix quiere mantener su posición dominante en el mercado frente a un número cada vez mayor de competidores será de vital importancia que su estrategia a largo plazo esté bien planificada”.
Papiol recuerda que, ante una posible recesión económica a causa del COVID-19, el gasto de los hogares de muchos consumidores puede verse reducido y se ha de mantener la calidad en las producciones si se desea mantener a estos suscriptores. “El coste de todo ello será significativo y nada ofrece a Netflix el mismo potencial de ingresos que la publicidad”.
Coincide Jon Artolozaga, director del área de intelligence data & analytics de GroupM, quien destaca, además, que los consumidores de plataformas OTT se muestran receptivos a la publicidad, siempre y cuando se integra de forma adecuada, sin ser intrusiva.
Aunque, para él, la posible pérdida de suscriptores al que podría enfrentarse Netflix finalizado el confinamiento no resultaría significativa. “Seguramente, cuando empecemos a salir a la calle, haya un descenso en cuanto a consumo, y también que haya suscriptores que se den de baja, pero otros se quedarán. No vamos a volver a la casilla de salida”, concluye.
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