Los inmigrantes consumen por valor de 35.000 millones de euros al año

Como cualquier otro, el consumidor inmigrante demanda productos de calidad a buen precio y muestra un marcado interés por aspectos

Como cualquier otro, el consumidor inmigrante demanda productos de calidad a buen precio y muestra un marcado interés por aspectos relacionados con la salud. Los motivos de elección de los establecimientos donde compran son también similares a los de la media española: en primer lugar el precio (61%), seguido de la cercanía al hogar (54%) y la calidad (39%), así como las ofertas y la variedad de marcas y productos.

La mayoría de los inmigrantes viven en pisos de alquiler (84%), aunque crece el número de propietarios de viviendas (15%), cuyo equipamiento se acerca bastante al de la media de los hogares españoles. El 95% dispone de lavadora, el 93% frigorífico y el 81% microondas, aunque sólo el 18% tiene vitrocerámica (frente al 51% de la media), el 14% lavavajillas, aire acondicionado y secadora (los porcentajes medios son del 45%, 39% y 23%, respectivamente).

En cuanto a tecnología doméstica, destaca el hecho de que el 100% de los hogares inmigrantes tienen al menos un aparato de televisión, el 74% cuentan con DVD y en una de cada cuatro viviendas ya hay un ordenador. Como dato curioso hay que señalar que el 93% de los nuevos residentes dispone de teléfono móvil, porcentaje incluso más elevado que la media nacional.

En cuanto a sus costumbres y horarios de comidas, la gran mayoría desayuna y almuerza en casa (75% y 55%, respectivamente) o en el trabajo (15% y 34%). El pan y el arroz son los alimentos básicos de su dieta, y consumen sobre todo bebidas sin alcohol (más del 90% de su consumo diario). También llama la atención su preferencia por la comida española (el 64% asegura que les gusta), de la que destacan la paella (44%) y suelen rechazar sobre todo el consumo de cerdo en todas sus variantes (33%), especialmente los consumidores magrebíes, por motivos religiosos. Algunos de ellos dejan de consumir alimentos de su país, principalmente por dificultades de elaboración, falta de tiempo o falta de productos.