A la hora de decidir en qué canal disfrutar de una película, los usuarios españoles optan por ir al cine. En concreto, un 22% frente al 18% que afirma tener por costumbre ver una película o serie a través de una plataforma de contenido bajo demanda, según datos del último estudio elaborado por la agencia de medios Wavemaker.
Con una muestra de 209.867 usuarios procedentes de 49 mercados distintos, el estudio subraya el auge a nivel global de las plataformas de suscripción de contenido como Netflix o HBO. Sobre todo, en los espectadores más jóvenes. Los millenials, aquellos usuarios con una edad entre los 25 y los 34 años, y la generación Z, espectadores entre 18 y 24 años, se hallan entre los públicos acostumbrados a consumir películas y series bajo demanda, con el 32% y el 24% de los entrevistados.
No obstante, en el caso de los primeros, un 32% también afirma acudir con frecuencia al cine – entendiendo por frecuencia asistir a las salas 11 veces o más al año-. Un hábito que los Z no poseen, con tan solo el 19% señalando ir al cine.
Los porcentajes se invierten a medida que se incrementa la edad. Ver una película en una sala supone una opción de ocio recurrente en los rangos de entre 35 y 44 años – con el 24% afirmando acudir al cine frente al 22% que ve televisión bajo demanda-, y entre 45 y 54 años – con el 16% frente al 14%-. A nivel global, el 9% de los espectadores mayores de 55 acude al cine con frecuencia, mientras que un 7% disfruta del contenido disponible en las plataformas de pago.
Los españoles vamos más al cine
En cuanto al mercado español, un mayor número de usuarios nacionales tiene por costumbre disfrutar de una película en taquilla once veces o más al año. En concreto, el 22%, 11 puntos porcentuales más que la media global. Mientras que el 18% de los españoles ya cuenta con el hábito de ver un filme a través de su cuenta de Netflix, HBO o Amazon Prime. Un punto porcentual menos que la media global, situada en el 19%.
Por edades, los patrones de consumo no varían demasiado con lo obtenido a nivel global. Los millenials y la generación Z resultan el público objetivo de las plataformas de contenido bajo demanda, con el 28% y el 17% de los encuestados. En cambio, ir al cine es una costumbre que posee el 31% de los espectadores con una edad entre los 35 y 44 años.
Algo que también ocurre en el rango de edad entre 45 y 54 años, con el 23% de los usuarios señalando acudir al cine frente al 18% admitiendo ver más películas y series en plataformas OTT. Los espectadores mayores de 55 años también tienen por tradición ver una película en la gran pantalla (16%), aunque un 10% afirma ver contenido bajo demanda con frecuencia.
