La nueva versión del navegador de Google, Chrome 85, traerá consigo novedades publicitarias. En concreto, la puesta en marcha de la política de intervención de anuncios pesados (heavy ads, en inglés), que establece el bloqueo de aquel contenido publicitario que suponga un consumo de más de 4 MBs de datos o 60 segundos de la CPU del ordenador.
Esta medida fue anunciada por la compañía de Mountain View el pasado mes de mayo, cuando señaló que este tipo de anuncios, a pesar de representar sólo un 0,3% de lo publicado en internet, consumen el 27% de datos y un 28% del uso publicitario total de la CPU.
En aquel momento, no anticiparon cuándo entraría en vigor dicha política, pero fuentes cercanas han confirmado a AdExchange que ésta estará ya vigente cuando se lance la nueva versión de Chrome, que está prevista para esta semana.
De acuerdo con Google, esta medida afectará a los anuncios que minan criptomonedas y a aquellos que alojan mini-juegos. Sin embargo, también podrían verse afectados aquellos anuncios de vídeo de larga duración, los formatos de rich-media y las publicidades sobresaturadas de etiquetas, con el consiguiente bloqueo en Chrome, el navegador con mayor cuota de usuarios a día de hoy.
Una medida que no sólo podría afectar a agencias y a anunciantes, también a los ‘publishers’. Es lo que teme un desarrollador del medio estadounidense BuzzFeed, que después de conocer la noticia el pasado mayo, mostró su preocupación en el foro del navegador de Google, Chromium. Según este, la medida podría afectar al 50% de los anuncios que sirve.