A día de hoy el mundo del influencer marketing está ampliando el rango de edad hasta el punto de dar paso a los «referentes sénior», adultos mayores de 55 años que lograron construir una marca personal, compartir su estilo de vida y aprendizajes. De esta manera, los perfiles “plata” están siendo muy demandados por las marcas, gracias a su capacidad de motivar en la consecución de objetivos personales y profesionales.
Su experiencia y conocimiento, así como su importante papel en la economía, las principales causas de su creciente éxito y demanda. Este tipo de perfiles son influencers que ponen la calidad del contenido por encima de la cantidad e intentan inspirar a la franja comprendida entre los 55 a los 75 años.
Tal y como muestra «la Guía de estilo de vida sénior» publicada por el Centro de Investigación Ageomgnomics de Fundación Mapfre, en Europa los silver son un activo de la economía, tienen en sus manos hasta el 70% del patrimonio y controlan más de la mitad del gasto total en gran consumo. Esto convierte a los sénior en un colectivo no sólo activo, sino también relevante en todos los ámbitos de la vida, desde el turismo, hasta la moda o las redes sociales.
“Los referentes mayores de 55 años responden a la demanda de diversidad al representar a un grupo demográfico muchas veces ignorado o discriminado. Además, satisfacen las necesidades de una audiencia diversa que busca contenido relevante y representativo de todas las etapas de la vida, ya que su presencia en las redes sociales promueve la inclusión y rompe estereotipos”, explica Juan Fernández Palacios, director del Centro de investigación Ageingnomics.
Con el objetivo de analizar esta nueva realidad, los expertos del Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación Mapfre explican las claves que justifican el creciente éxito de los referentes sénior a nivel social y económico:
– Ayudan a luchar contra el edadismo y a fomentar una representación más equitativa y diversa. Según un informe de la Organización Naciones Unidas (ONU), el 45% de los españoles afirma sentirse discriminado por su edad.
-En este sentido, mostrar una variedad de edades en las plataformas digitales está ayudando a desafiar los estereotipos relacionados con el envejecimiento, a promover una mayor aceptación de la diversidad generacional y a establecer un puente entre generaciones, impulsando un diálogo significativo donde tanto jóvenes como sénior puedan aprender los unos de los otros.
– Son un ejemplo de vida para todo tipo de generaciones. Los referentes sénior son una inspiración para públicos de esta edad en cuanto a envejecimiento activo, desarrollo o reinvención laboral, gestión del día a día, turismo y ocio, moda, instando a otros a llevar un estilo de vida similar y acercándoles contenido útil y de interés para conseguirlo.
Sin embargo, su sabiduría, historias inspiradoras, logros y experiencia en áreas concretas de la vida también les ha convertido en un ejemplo para el resto de las generaciones más jóvenes. Compartir sus conocimientos y consejos está teniendo un gran valor para la sociedad en general, motivando a todos los públicos a perseguir sus objetivos, sin importar la edad o las circunstancias.
–Son activos en redes sociales y cuentan con una sólida base de seguidores. Según el ‘IV Barómetro del Consumidor Sénior’, realizado por el Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación Mapfre, 12 millones de españoles sénior ya están en internet (73%), y el 44% de ellos consulta o publica contenidos en redes sociales, al menos, una vez al mes. En concreto, el 26% lo hace varias veces a la semana, el 8% una vez a la semana, el 4% una vez cada 15 días, y el 6% una vez al mes.
–Las marcas están cada vez más alineadas con su mensaje. Como respuesta a esta tendencia, se han convertido en uno de los perfiles más buscados por las empresas que se dirigen a ellos, por ofrecer una perspectiva auténtica y confiable que dé seguridad sobre sus productos y servicios, y que representa una oportunidad para hacer frente al edadismo.