El mundo del marketing ha ido desarrollándose tanto con los avances tecnológicos, como con la evolución de la forma de comprar de las personas. Actualmente, la rapidez se ha apoderado de los consumidores que buscan disponer de una gran cantidad de opciones y que éstas lleguen lo antes posible a sus manos. Aquí entra en juego la logística promocional, un sector lo suficientemente eficiente para manejar de forma correcta toda esta situación.
En este sentido, la logística promocional se presenta como un componente esencial en la estrategia de cualquier marca presente en el punto de venta. Es importante destacar que su influencia no se limita únicamente a la eficiente distribución de los productos y el material promocional, sino que va mucho más allá, repercutiendo directamente en dar visibilidad y en conseguir el éxito de una marca en el mercado.
Así, la principal diferencia que caracteriza a este tipo de logística de la tradicional es que su último objetivo es dar a conocer en el mercado una nueva marca o producto, del mismo modo que incentivar, gracias al PLV, estos productos nuevos o el consumo de otros ya existentes.
Beneficios
En este contexto, la logística promocional cuenta con numerosos beneficios. El primero de ellos es la planificación logística, lo que permite evitar problemas y favorecer soluciones rápidas en caso de que se produzca algún inconveniente con la recepción de los productos. Por otro lado, gracias a este servicio, los productos están en el momento justo y en el lugar adecuado gracias a un proceso optimizado y un control estricto de todos los pasos a seguir, como la producción, el almacenamiento, el transporte, la entrega o el montaje. Y, por último, permite que, gracias a una buena planificación, que los objetivos de la estrategia de marketing se superen sin inconvenientes, buscando siempre la eficiencia y la productividad para obtener los resultados esperados.
Pero ¿qué pasos se deben seguir para llevar a cabo una buena gestión de la logística promocional? En primer lugar, debes contar con una buena planificación estratégica. En este contexto, es fundamental identificar los objetivos, además de tener en cuenta la cantidad de recursos con los que cuenta la empresa. Éstos deben estar bien definidos para que no se comentan errores en todo el proceso.
En segundo lugar, para ofrecer a los clientes todos los productos disponibles es necesario contar con una correcta gestión del inventario y comprobar que hay stock suficiente. No tener disponibilidad de todos los productos que permitan satisfacer la demanda de los consumidores dejará entrever una mala gestión de la marca. En este punto es esencial la coordinación entre los gestores de inventario y los proveedores.
Por otro lado, una distribución óptima para cumplir con los plazos de entrega establecidos y que los productos no lleguen con retraso es fundamental. Así como la exposición de los productos en el punto de venta, estas dos acciones van ligadas entre sí, ya que cuando lleguen los productos, el equipo encargado de la promoción en tienda tiene que estar preparado para organizar la visualización de los productos que forman parte de la promoción.
Todos estos procesos deben estar regulados y vigilados por un control del proceso logístico, el cual analizará si la logística promocional ha sido un éxito o, por el contrario, hay que mejorar y solucionar los posibles fallos que se hayan podido cometer.
En definitiva, el papel de la logística promocional es fundamental para que las promociones tengan éxito en el punto de venta, y así aumentar las ventas y dar a conocer nuevos productos a potenciales clientes. Cada uno de estos pasos es importante para que todo funcione correctamente y se cumplan los objetivos de la campaña de marketing.
