Según el estudio La prensa: digital vs. papel, realizado por la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC), únicamente el 3% de los encuestados declara pagar por leer la prensa en Internet. Asimismo, el precio es la principal razón que esgrimen los internautas que acceden a los diarios en formato electrónico para no leer los diarios en papel.
No obstante, el formato tradicional en papel no está reñido con el uso de los medios digitales. Así lo demuestra el estudio llevado a cabo por la AIMC, ya que al menos un 32% de los internautas reconoce leer tanto diarios en soporte tradicional como a través de Internet.
Los motivos de acceso a una u otra versión son muy distintos, si bien se aprecia una complementariedad entre estos dos sistemas de difusión. En los diarios en soporte tradicional destacan aspectos de contenido y análisis, como son las columnas de opinión y los temas en profundidad. La versión electrónica es preferida por los lectores no sólo por las noticias de actualidad, sino también para buscar información adicional a la hora de decidir sobre una compra.
En comparación con los datos del estudio de 2010, los resultados de este año revelan un afianzamiento. Según la AIMC, la preferencia de la versión en papel para temas en profundidad pasa del 50,6% al 57,3%, y las preferencias de la versión electrónica para noticias de actualidad o informarse de algo que se desea comprar crecen del 43,8% al 55,5% y del 51,9% al 61,9%, respectivamente.
Los lectores que leen tanto la versión en papel como la digital no le dedican el mismo tiempo por igual a la primera que a la segunda opción. De hecho, a pesar de que los diarios tradicionales hayan ganado algunos nuevos lectores, un 56% de los mismos reconoce dedicarles menos tiempo, y solo el 42% indica seguir leyendo igual que antes.
Este tipo de lectores que disfrutan de la lectura en ambos formatos, además, son importantes consumidores de diarios, con un promedio de lectura de 2,1 cabeceras de diarios en papel. Ratio que se incrementa hasta 2,9 títulos si se trata de prensa en línea.
Más del 60% de los lectores de diarios a través de Internet tienen una antigüedad que oscila de uno a cinco años. El 20% lleva haciéndolo entre seis y nueve años y el 4% más de una década. Por el contrario, únicamente el 12% accede a los diarios en línea desde hace menos de un año.
De acuerdo con el estudio de la AIMC, el ordenador portátil continúa siendo, en el 70% de los casos, el dispositivo prioritario de acceso para la lectura de prensa en línea. Sin embargo, se aprecia un notable ascenso de los dispositivos móviles, sobre todo en teléfonos (16,6%) y tabletas (4,5%).
El pago por acceso a la información es bastante residual. El estudio destaca que únicamente el 3% lo hace de forma habitual, aunque este porcentaje disminuye al 1,3% si no se contabiliza a aquellos lectores que tienen incluido el acceso de pago a un diario digital al estar suscritos a la versión de papel.
UN TERCIO NO LEE DIARIOS en línea. Según la AIMC, al menos un 35% de los internautas consultados no accede a los diarios digitales. Sus principales motivos para no hacerlo radican en que la prensa tradicional puede leerse en cualquier momento y lugar (39,8%), un aspecto que da una cierta potencialidad a los nuevos dispositivos móviles. Otra de las causas más destacadas para no leer la prensa en Internet (37,4%) es la sensación subjetiva de que no se disfruta igual de la lectura en formato digital que en papel. Además el 15,5% esgrime las molestias que supone la publicidad en la web.
En el extremo opuesto, los que acceden a diarios en formato electrónico y no leen los diarios en papel, representan un 5,6% de los internautas. Las razones para preferir la web al papel son, principalmente, de carácter económico, ya que un 81,6% reconoce que puede leer la misma información de manera gratuita en la Internet.
Ficha técnica
El trabajo de campo del estudio La prensa: digital vs. papel se realizó entre los días 20 de mayo y 16 de junio de 2011. La muestra útil alcanzó 400 entrevistas que se llevaron a cabo en Internet, aprovechando contactos del EGM (oleada de 2011) que facilitaron su dirección de correo electrónico. El universo estaba formado por internautas, independientemente de si eran o no lectores de prensa diaria, tanto en soporte tradicional como digital.
C. H.
