Resultados negativos los presentados por WPP tanto en el segundo trimestre como en el primer semestre de su ejercicio. Los ingresos del grupo publicitario han caído a doble dígito, del orden de un 18,4% entre los meses de abril, mayo y junio, y de un 11,5% en su primer semestre.
Mark Read, CEO de la compañía, se ha mostrado, sin embargo, satisfecho con los datos arrojados ante los inversores, teniendo en cuenta el gran impacto que está dejando la pandemia de coronavirus en los resultados trimestrales de las empresas. También, las del sector publicitario.
El optimismo de Read radica en la liquidez conseguida con la transacción de Kantar, de 4.700 millones de libras, que sumado al ahorro de los costes operativos (un 6,5% más en el primer semestre), “nuestra posición financiera permanece fuerte”. Se añade el hecho de que ocho de los 10 mayores clientes del grupo hayan incrementado su actividad ecommerce y, por ende, acelerado su estrategia digital, y la obtención de 4.000 millones de libras en nuevo negocio, gracias a la adquisición de cuentas como Intel, HSBC y Unilever.
“Nuestra transformación estratégica sigue en pie, pero conforme la COVID-19 acelera el cambio en nuestro sector, aceleramos nuestros planes. Continuamos atrayendo a nuevo talento, invirtiendo en tecnología y ecommerce, y formando a nuestro personal en las habilidades que necesitan para el futuro”, ha destacado Read.
La caída de los ingresos también se ha visto reflejado en el beneficio neto. A cierre de junio, éste se situó en los 212 millones de libras, un 44,6% menos que en el mismo periodo de 2019, cuando el grupo logró 382 millones.
Los distintos mercados en los que opera han experimentado, de igual modo, un retroceso en su actividad. Los mayores descensos se han dado en Reino Unido y en la región de Asia Pacífico, América Latina, África y Oriente Medio y Europa Occidental, con un 24,9% y un 20,1% menos, respectivamente, en el segundo trimestre, y un 14% y un 13,8% en negativo, en el primer semestre.
Por otro lado, la partida de nuevo negocio, con 4.000 millones de libras ganados en el primer semestre ante la obtención de las cuentas de Intel, HSBC, Unilever y WW, y el hecho de que el 56% de las ganancias netas de sus principales 200 clientes procedan de los sectores de Gran Consumo, Tecnología y Salud y Farmacia, originan que la multinacional anticipe unos resultados para finales de año todavía en negativo, pero con una menor desaceleración.
Así, teniendo en cuenta el ambiente macroeconómico incierto y asumiendo que no habrá más confinamientos de la población en sus principales mercados, esperan una caída de los ingresos netos de entre el 10% y el 11,5%. De igual modo, ven con buenos ojos la consecución del objetivo de ahorro en costes para finales de año, marcado en los 700-800 millones de libras.