El objetivo de la acción era animar a los madrileños a cambiar los hábitos y las sustancias nocivas del tabaco por la costumbre sana de comer pipas de girasol. Para ello un total de 2.500 bolsas de pipas El Piponazo fueron entregadas a los ciudadanos a cambio de sus paquetes de cigarrillos.
El evento organizado por Grefusa contó con la colaboración de la Asociación Norteamericana del Girasol, una organización sin ánimo de lucro dedicada a la comunicación y promoción de las pipas de girasol originarias de Estados Unidos.
Gresfusa es una de las empresas españolas más importantes dentro del sector de los snacks, frutos secos y productos horneados. El Piponazo es una de sus marcas más conocidas.