Google ha anunciado cambios en el reparto de ganancias que realiza a los editores en su red de AdSense. El más destacado, el cambio de moneda en la forma de distribuir tales ingresos, pasando del pago por clic al pago por impresión a comienzos de 2024.
Según ha informado Dan Taylor, vicepresidente de anuncios global de Google, a través del blog corporativo, la compañía va a actualizar la estructura de reparto de ingresos de AdSense y dejar de pagar a los editores por clic para hacerlo por impresiones, adaptándose a la fórmula empleada por otras firmas de ad-tech.
Respecto al primer cambio, Taylor ha recordado la fórmula empleada hasta ahora por la compañía para recompensar a los editores por los espacios publicitarios dejados en su web. “Anteriormente, la red de Google AdSense procesaba los pagos dentro de una única transacción. Ahora, estamos dividiendo la cuota en dos ratios diferentes, uno para el lado de la compra y otro para el lado de la venta”, explica.
Con el nuevo sistema, para los anuncios display mostrados con AdSense, los editores recibirán el 80% de los ingresos después de que la plataforma del anunciante haya cogido su comisión, ya sea el DSP de Google o de terceros. En el caso de que Google Ads sea el que compre dichos espacios, la comisión se mantendrá en el 68%.
Asimismo, AdSense dejará de pagar a los editores por los clics conseguidos en su espacio publicitario y optará por el estándar adoptado por la mayor parte de la industria, la impresión. “Esta actualización proporcionará una forma más uniforme de pagar a los editores por su espacio publicitario en los productos de Google y en plataformas de terceros, ayudándoles a comprar con otros proveedores tecnológicos que usen”, ha informado Taylor.
El responsable de anuncios de Google ha recordado asimismo que estos cambios no influirán en el tipo o la cantidad de anuncios que los editores puedan mostrar en sus webs, ya que deberán adherirse a las políticas de AdSense y a los estándares de mejores anuncios de la Big Tech, que no permiten prácticas como la incorporación de anuncios pop-up o de formatos que interrumpan la navegación y acaparen la mayor parte de la pantalla.
Estos cambios entrarán en vigor a partir de 2024 y no requerirán ninguna acción por parte de los editores.