Ante la posibilidad de contar con un identificador digital único que sirviera para acceder a cualquier servicio online y disponer, de paso, de control sobre los datos personales que éste emplea, más de la mitad de los ciudadanos europeos se muestra a favor de contar con uno. Un 60%, además, compartiría parte de su información personal con los organismos públicos si sirviera para mejorar las investigaciones médicas, la respuesta a situaciones de crisis, el transporte público o la eficiencia energética.
Son datos del informe ‘The impact of digitalisation on our daily lives’ (El impacto de la digitalización en nuestra vida diaria, en español), impulsado por la Comisión Europea para analizar las actitudes de los ciudadanos europeos en ciertos aspectos digitales, entre ellos, el empleo de datos personales para mejorar servicios públicos o el uso de un ID digital único.
Sobre este último, un 63% cree que sería útil contar con un identificador de este tipo que sirviera para todos los servicios disponibles en el terreno digital, tanto aquellos del ámbito público como del privado, y les permitiera controlar el uso que dan éstos de sus datos personales. Para un 28% resultaría “muy útil” y para un 35%, “bastante útil”. Cerca de un tercio de encuestados (26%) no ve provechoso este sistema, y un 14% señala que no lo es “para nada”.
En España, el porcentaje de usuarios dispuestos a emplear un ID digital único resulta superior a la cuota europea: 67%, frente a un 23% que no lo ve así. Situación parecida en cuanto a si desean tener un papel más activo en controlar el uso de su información personal por parte de las compañías que operan en el ámbito digital. Un 61%, en contraposición al 23% que no le gustaría y un 13% que señala que no desea compartir datos personales.
A nivel europeo, un 46% muestra interés en contar con mayor voz en la gestión de sus datos personales, frente a un 38% que no.
Compartir información personal con organismos públicos
Preguntados acerca de si compartirían parte de su información personal con los organismos públicos, seis de cada 10 europeos se muestra a favor, aunque el porcentaje varía en función del objetivo que se persiga. Así, un 43% lo haría “para mejorar la investigación médica y de cuidado personal”; un 31% para “mejorar la respuesta a situaciones de crisis, como desastres naturales, epidemias o ataques terroristas”; un 27%, si ello sirviera para “mejorar el transporte público y reducir la contaminación”; y un 24%, para “mejorar la eficiencia energética”.
A nivel nacional, un 61% se muestra a favor de compartir con las entidades públicas datos personales, frente a un 34% en desacuerdo. Entre los objetivos, la investigación médica reúne el mayor número de adeptos (45%), seguido de una mejor respuesta ante una crisis (32%), la optimización del transporte público y una reducción de la contaminación (32%), y una mejora de la eficiencia energética (32%).
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