Esther Chicharro CEO de Distpublic

Texto / Rocío Calderón

Fotos / Distpublic

Esther Chicharro (Distpublic): «Nos encontramos en un momento muy conversacional»

A finales de 2019, Distpublic, agencia de publicidad especializada en la gestión de acciones orientadas al marketing directo y promocional, iniciaba la renovación visual de su marca y página web para responder a las necesidades de los clientes y consumidores actuales y dar impulso a su principal actividad: el marketing directo. La CEO de la empresa, Esther Chicharro, nos ha contado los entresijos del rebranding corporativo en el escenario digital, además de conocer cómo se adaptaron a las circunstancias tan excepcionales de 2020.

Distpublic estrenó en 2020 nueva imagen y web corporativa, ¿por qué decidieron la transformación?

En Distpublic, siempre hemos apostado por renovarnos y cuidar nuestra marca como elemento diferenciador, adaptándonos a las necesidades y demandas del mercado. Esto nos ha llevado a lo largo de nuestros 30 años de recorrido a actualizar nuestra imagen corporativa en varias ocasiones. A finales del 2019, decidimos que había llegado el momento de cambiar una vez más para adecuar tanto nuestra web como nuestra marca a inicio de 2020, con un entorno más digitalizado y visual. 

En la imagen corporativa anterior, jugábamos con la papiroflexia como elemento conductor de comunicación ya que, una parte importante de nuestras líneas de negocio giran en torno al trabajo con las manos y las personas.

Actualmente, todo puede cambiar en fracciones de segundo y, a mi parecer, acertamos dando ese impulso necesario a nuestra imagen e incrementando así la confianza de nuestros clientes.

¿Cuáles fueron los objetivos principales para introducir estos cambios? 

El rebranding que hemos llevado a cabo viene impulsado por una evolución de nuestra principal actividad: el marketing directo. Esta revolución, tanto a nivel operativo como a nivel control, está basada en la integración de las nuevas tecnologías y el conocimiento del dato, cuanto más detallado mejor. Necesitábamos plasmar esa apuesta por la digitalización y por la innovación, en la que, además, el factor humano sigue siendo clave en los procesos.

Gracias al rediseño del logotipo, el cambio en el uso tipográfico, la evolución a un cromatismo más amable y la síntesis de nuestro elemento identificador, hemos creado un código de comunicación amplio, que nos sirve de paraguas para otras marcas secundarias y líneas de negocio del Grupo Distpublic, como Promoiberia, Distgeo y Logicpromo. 

Una puesta apunto para un nuevo tiempo, en el que el análisis de datos, la estrategia y la apuesta por la calidad se han convertido en los factores fundamentales de un nuevo marketing directo.

¿El marketing directo en qué situación se encuentra actualmente?

En momentos como el actual, donde prima la incertidumbre, es cuando se buscan formas de llegar a los clientes mucho más directas y concretas. Esto hace que muchas marcas estén apostando por él. Estamos notando, como ya ocurrió en otras crisis, una subida de la demanda de acciones muy medidas y estudiadas. Más que nunca toman un papel protagonista los datos y el expertise.

Nos encontramos en un momento muy conversacional, muy «hands on». Se valoran todas las opciones hasta llegar a soluciones a medida. Ahora debemos transmitir seguridad y confianza, el cliente quiere sentirse atendido y cuidado más que nunca.

Ahora debemos transmitir seguridad y confianza»

La buena noticia es el auge de creatividad tanto en la tipología de acciones como en los formatos empleados. El cambio de paradigma supone reimaginar, buscando herramientas y soluciones que permitan generar una lasting impression diferenciándonos y creando marca. Para ello, contar con los partners adecuados es esencial.

Reinventarse

El mundo trabaja ‘en remoto’ debido a los efectos de la COVID-19, ¿cómo se ha adaptado Distpublic a las nuevas circunstancias? ¿Qué soluciones demandan las marcas en tiempos de pandemia?

Como casi todo el mundo, Distpublic se ha visto afectado por la pandemia y hemos tenido que adaptarnos a las exigencias y necesidades del mercado. Si bien, parte de nuestra actividad, como la logística de última milla como servicio esencial no ha parado e incluso, ha sido una línea de negocio en la que hemos trabajado con muchísima mayor intensidad, para otros de nuestros servicios nos vimos obligados a buscar otras alternativas y potenciar los servicios que sí podíamos ofrecer. Como era el caso de  Promoiberia, nuestra línea de negocio dedicada al regalo promocional, desde la cual estos meses nos hemos enfocado en la venta de material de protección, ofreciendo soluciones para ayudar a las empresas a mantenerse protegidos, tanto sus trabajadores como sus clientes, con un amplio abanico de productos.

Las marcas demandan agilidad y capacidad de adaptación para llevar a cabo su visión y los cambios derivados en tiempo récord dado el presente convulso en el que vivimos. Tener un buen equipo que sepa surfear las olas y una estructura flexible que permita responder rápido ante los virajes es vital.