El tándem normativo que viene a actualizar el marco jurídico de la economía digital en Europa, la Ley de Servicios Digitales (DSA) y la Ley de Mercados Digitales (DMA), podría estar muy pronto activo en la región.
Tras su aprobación en el Parlamento Europeo en diciembre y enero, el texto elaborado por la Comisión Europea en diciembre de 2020 y que ha sido objeto de largo debate entre los europarlamentarios, actualmente forma parte de las mesas de negociaciones a tres – Comisión, Parlamento y Consejo europeos-. Si estos encuentros se producen sin muchos escollos a superar, se prevé que las nuevas normas entren en vigor antes de julio de este año, coincidiendo con el final de la presidencia de Francia.
De ello ha informado Carlos Romero Duplá, consejero de transformación digital en representación permanente de España ante la Unión Europea, durante la celebración de la octava edición del Congreso de Regulación Publicitaria Digital, organizado por IAB Spain en formato virtual.
Y ello a pesar de los acalorados debates vistos en el Parlamento acerca, sobre todo, de la Ley de Servicios Digitales y, en concreto, sobre la iniciativa de prohibir la publicidad segmentada. “Una medida que podría resultar excesiva porque es un instrumento fundamental de la economía en línea y no tiene porqué ser perjudicial para los usuarios”, ha comentado Romero.
O las enmiendas relacionadas con el consentimiento del usuario, que pueden ser compatibles con la posición tomada en el Consejo Europeo en la nueva norma de telecomunicaciones. “Todas estas propuestas son hasta cierto punto razonables, lo que me lleva a pensar que la negociación no tarde mucho en concluirse. Ambas instituciones están comprometidas a que este reglamento se apruebe cuanto antes”, ha asegurado.
Confirma las palabras del consejero, Ana Balcells, legal and policy officer digital services and platforms Unit DG Connect de la Comisión Europea: “Existe un compromiso por parte de los colegisladores de que las propuestas se adopten lo antes posible”. Las reuniones continuarán hasta abril y se aspira a que sean aprobadas antes de verano, asegura Balcells.
No correrá la misma suerte el Reglamento ePrivacy, en manos de los organismos en estas negociaciones a tres desde marzo de 2021, y que entre sus artículos se contempla la regulación de la cookie y de otras tecnologías relacionadas. “Es difícil prever cuándo será posible proceder a la adopción de este reglamento”, ha explicado Rafael Pérez, subdirector general para la sociedad digital del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. “La presidencia francesa está intentando avanzar, pero no creo que se llegue a un acuerdo antes de que acabe su mandato”.
Eficacia de la autorregulación
Mar España, directora de la Agencia Española de Protección de Datos, ha recordado el papel activo de la agencia en la elaboración del Reglamento ePrivacy, “espero que en algún momento pase a ser una ley aprobada y practicable”, y la función que tiene el organismo para imponer sanciones cuando se incumplen las normas contempladas en su antecesora, la Ley de Servicios de Sistemas de la Información (LSSI), en vigor.
No obstante, apunta a que “es más esencial guiar en la privacidad por defecto y en el diseño que sancionar”. A este respecto, pone como ejemplo que un 76% de las reclamaciones se resuelven con el mecanismo de mediación de Autocontrol o la eficacia del traspaso de obligaciones a los delegados de protección de datos (DPDs).
“Somos la única autoridad nacional que establecimos un mecanismo expreso del traslado de obligaciones a los DPDs, que facilita la resolución de las reclamaciones. Un 50% de los casos se resuelven con este traslado”, ha afirmado España.
Data Act
El consejero de transformación digital, Carlos Romero Duplá, ha informado asimismo de las próximas normas que se diseñarán, presentarán y debatirán a lo largo del año en la Unión Europea y que marcarán nuevas pautas en el sector del marketing y la publicidad digital.
“Estamos negociando la primera norma mundial sobre Inteligencia Artificial, muy importante. Una norma horizontal que afecta a todos los sectores y que establece un catálogo de usos éticos en los sistemas de IA”, ha informado.
Se sumará una nueva ley enfocada al uso de los datos y de las bases de datos, la llamada Data Act, donde se aspira a que el dato fluya, sea dúctil, portable y se reutilice en la región. “Sabemos que va a incluir normas sobre los datos generados entre dos industrias, la interoperabilidad de los sistemas, pero también debería incluir disposiciones ambiciosas sobre la portabilidad en diferentes entornos, no solo business-to-government, también B2C y B2B”, añade Romero.
Esta norma será presentada por la Comisión Europea a finales de febrero, concluye.