Lo mismo pasa en publicidad. Nos ocupamos diariamente de las grandes cuentas, de los grandes medios, de la televisión o de la prensa. Y del buzoneo, ¿quién habla del buzoneo? ¿Alguna vez ha oído hablar a algún gurú de la publicidad de este medio que se mete por debajo de la puerta o se deposita en un buzón?
Pues sepan que el 74% de los consumidores, entre los que me encuentro, lee los folletos que recibe en su buzón doméstico. El 26% restante nunca o casi nunca los lee. Peor para ellos, que se pierden alguna que otra oportunidad.
He aquí un medio eficaz, que lo será en mayor grado si se maneja bien, con una buena creatividad y se afina con el target.
Hay más información útil para los estrategas de marketing que prefieren la eficacia al oropel en el estudio realizado por TNS para Carben, empresa de distribución de publicidad directa (buzoneo). Por ejemplo, que este tipo de publicidad alcanza su mayor éxito en las ofertas de precio o las ofertas de vales descuento o cuando se trata de muestras de producto. O que los sectores sobre los que más interesa recibir información a través de este medio son alimentación y droguería, equipamiento del hogar, informática y mobiliario.
En tiempo inmemoriales David golpeó con fuerza a Goliat. Pasa muchas veces en el marketing y la publicidad. Lo sencillo también vende. Lo sencillo es más barato.
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