Según el VIII Observatorio de Redes Sociales, la penetración de las redes sociales no crece en España desde 2011 y se mantiene estable en un 91%. De media, los usuarios se conectan seis horas diarias, sobre todo a Whatsapp y Facebook, que siguen siendo las plataformas con más éxito en nuestro país.
El estudio, elaborado por Arena Media y The Cocktail Analysis, destaca también el ascenso de Instagram, que ya tiene una penetración del 41%, desbancando a Twitter, que pasa a tener un 39%.
Como tendencias emergentes, los responsables del estudio señalan el auge de autenticidad y la espontaneidad en las redes sociales, frente al postureo. Esta nueva corriente se sustenta a través de formatos como los vídeos efímeros – Snapchat e Instagram Stories – en los que prima la naturalidad y los usuarios se aseguran que dichos contenidos se destruyen y no dejan rastro. Se trata de una actitud de búsqueda de control de su “yo-persona”, frente a la adaptación de su “yo-consumidor” que acepta compartir información con las marcas.
En este sentido, el Observatorio distingue cuatro perfiles de usuarios, según su interacción con las marcas: outsiders, usuarios con relación básica o nula con las marcas; curiosos, siguen a las marcas para estar al tanto de tendencias y novedades del sector; clientes, siguen a la marca para conocerla en profundidad, y entusiastas, aquellos que consideran que el valor trasciende de la marca al contenido.
Contenidos pertinentes, relevantes y auténticos
En cuanto a la relación entre usuarios y marcas, el Observatorio destaca la necesidad de adecuar los contenidos bajo tres pilares: la pertinencia, la relevancia y la autenticidad. Las marcas deben ajustar su tono a cada momento y a cada una de las redes sociales, adecuar el tipo de contenido a cada plataforma y trabajar los valores que se transmiten en cada RRSS.
Por último, el estudio señala la expansión de los servicios de mensajería instantánea y las posibilidades de estos soportes para las marcas. Se constata el uso frecuente de estas apps como micro-redes sociales. El usuario se muestra atraído por comunicaciones de marcas, por estos medios, siempre y cuando tenga una utilidad muy concreta y no viole este espacio privado. Por ejemplo, el 45% de los encuestados valoraría como muy interesante que una empresa de mensajería les informase sobre el estado de su pedido vía WhatsApp.