Los hogares españoles redujeron la cesta de la compra a lo largo de 2018 (-0,7%) como consecuencia, entre otras causas, al alza general de los precios (+3,4%), aun así los consumidores gastaron más que en 2017 (+2,6%) hasta los 82.000 millones de euros. Tal y como se recogió en la presentación del informe ‘Radiografía del gran consumo en España 2018’, por parte de Ricardo Alcón, responsable de Nuevos Negocios de Nielsen.
El ticket está más reducido pero el desembolso es mayor, frente a la tendencia de 2017, cuando se compraba más a pesar también de los altos precios.
Los productos frescos tuvieron un papel protagonista en la cesta de la compra del año pasado, ya que una tercera parte del gasto se destinaba a alguno de estos alimentos, a pesar de sufrir una subida general de precios (+4,8%). La fruta (+9,3%) y el huevo (7,6%) tuvieron el mayor aumento, aunque el segundo incrementó un 2% su consumo, gracias, sobre todo a que se le considera la proteína barata y también por el abanico de opciones.
Por su parte, la carne (+3,1%) y el pescado (3,6%) también sufrieron subidas de precios, registrando el segundo de ellos la mayor caída en el ticket de la compra (-8%), debido, principalmente, a que hay más alternativas económicas (congelados).
En cuanto al pan tradicional, se observa una bajada de la demanda (-4,2%) y un aumento en la búsqueda de otras opciones (pan de semillas, centeno, maíz…).
Los productos también están condicionados por el lugar, ya que cada vez se compra más en supermercados o hipermercados (56%) frente a la tienda tradicional (44%), lo que supone un aumento del 1,5% en la cuota del mercado de las nuevas cadenas de distribución.
No hay marcas favoritas
Ahora, los españoles no tienen un supermercado o hipermercado favorito a la hora de realizar la compra, se adquieren los productos en función a diferentes factores como, por ejemplo, las promociones. De hecho, dos de cada tres está dispuesto a cambiar un producto por el descuento ofrecido, lo que significa que un 75% de los consumidores modificaría su compra.
Además, los usuarios cada vez tienen menos marcas favoritas, ya que se observa que un 13% de los españoles la cambiaría ante una oferta atractiva, un 36% busca activamente descuentos en las tiendas y un 26% se va del establecimiento por un descuento. En ese sentido, las marcas de fabricante apuestan por este tipo de promociones (26%), en cambio las de distribución bajan un punto porcentual (8%), aunque siguen manteniendo su relevancia en la cesta (39,4%).
El vino y la cerveza, marcan la diferencia
El año pasado, la climatología protagonizó una de las primaveras más lluviosas en España desde 1965 y de las más frías del siglo (AEMET). Estos factores climatológicos también afectaron al consumo y a la subida de precios, sobre todo a la sección de bebidas (-1,7%) -salvo el agua-.
A pesar de la caída de las ventas en las bebidas, el español ahora bebe “más caro y mejor” que antes. Un ejemplo de ello es el vino, los consumidores desembolsaron más presupuesto en productos premium y con denominación de origen (DO).
En el caso de la cerveza, la tendencia es parecida, los españoles optan por las gamas más artesanales. Así, el consumo de productos premium o especiales provoco que se facturase más fuera de casa a cierre de ejercicio, lo que se traduce en que cada una aporta la mitad del crecimiento de las bebidas en hostelería, cuyo gasto ascendió un 2% hasta los 8.874 millones de euros.
La tienda ‘online’ gana peso
Cada vez somos más digitales, la tienda online registró el año pasado un incremento del 17% con respecto al ejercicio precedente. De hecho, una de cada cuadro personas realizó una adquisición de gran consumo en 2018.
Sin embargo, no compramos de todo desde el canal virtual, los productos preferidos son los envasados, en un 1% (pañales y alimentos infantiles, droguería, agua…) y frescos, en un 0,6% (carne preparada, pollo y pavo, fruta, verdura…).
Oportunidades de crecimiento en el mercado
Según los resultados de Nielsen, hay tres factores importantes que tienen una tendencia de crecer en el mercado: Salud, impulso/moda y conveniencia.
-Salud: no hay duda, somos más sanos y buscamos productos que nos ayuden a “cuidarnos por dentro y por fuera”, como son los alimentos bio, que registró un crecimiento de ventas del 34%. Ricardo Alcón añadió que existen 20 categorías que aportan el 80% del incremento, entre ellas, la leche, cereales desayuno, yogures, chocolates, alimentos infantiles, postres, cafés o platos preparados de conservas.
-Conveniencia: los hogares optan cada vez más por productos preparados como los cafés de monodosis, humus, guacamole, ensaladas, tortilla refrigerada, gazpacho, sushi, bacalao congelado, entre otros. “El consumidor reclama estos artículos a los distribuidores, los cuales deben darle esa demanda si quieren lograr el éxito”, señala el representante de Nielsen.
-Impulso/moda: la compra en esta categoría solo se puede realizar en la tienda físico, que suelen ser patatas fritas de sabores, cervezas Premium, sidra, snacks, alimentación para perros…