La aplicación obligatoria del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), que se inicia el próximo 25 de mayo, va a suponer todo un desafío para muchas empresas que deberán obtener el consentimiento expreso de los usuarios registrados en sus bases de datos.
Los consumidores se van a ver asaltados durante las próximas semanas por una avalancha de peticiones de consentimiento y aquellos registrados que no lo concedan de manera explícita deberán ser eliminados de las bases de datos, lo que supone un grave quebranto para los departamentos de marketing tras el esfuerzo que supone la recopilación de datos y su tratamiento. Es importante implementar cuanto antes las estrategias de aplicación y cumplimiento del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
Por tanto, para las compañías resulta vital obtener ese consentimiento expreso que impone el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD). A fin de que el intento sea lo más fructífero posible, los expertos en business consulting de Prodware han elaborado un decálogo con una serie de estrategias de marketing para comunicar a clientes y usuarios la aplicación de GDPR y obtener fácilmente el consentimiento de los registrados en las bases de datos:
– Organizar una campaña en oleadas: antes del 25 mayo da tiempo a impactar al menos dos veces a la base de datos.
– Crear campañas segmentadas con y mensajes adaptados a los diferentes públicos objetivos (según edad, intereses, sectores, etc.)
– Planificar las comunicaciones para conseguir el consentimiento de los clientes: más comunicaciones, más canales, mensajes más trabajados, etc.
– Estratificar la base de datos en función del valor que tienen los registros al menos en tres grupos: A, B y C, de mayor a menor valor. El objetivo no es conseguir un alto porcentaje de consentimiento, sino lograr que la mayoría de los registros de alto potencial den su consentimiento.
– Utilizar creatividades y texto atractivos: la llamada a la acción es que marquen la casilla.
– La opción del permiso tiene que estar en un lugar destacado: se trata de llamar la atención sobre él.
– Experimentar con el lenguaje y las opciones del permiso: una idea es poner dos opciones excluyentes en el mismo formulario. Por ejemplo, “No quiero estar” y “Quiero estar”.
– Centrar el discurso en los beneficios de estar en la base de datos: informar sobre el RGPD pero usando el lenguaje, la tipografía y la maquetación corporativa para que no parezca solo un mensaje de carácter legal. Antes del 25 de mayo sería recomendable mandar un correo a todos los que no hayan dado consentimiento expreso para recordarles a todo lo que renuncian si deciden no autorizar la comunicación.
– Utilizar todas las capacidades de marketing: hacer test A/B para probar creatividades y mensajes.