La segmentación contextual puede aumentar el interés de los consumidores hasta 2,5 veces más por contenidos específicos. A su vez, la publicidad contextual logra incrementar el interés de los consumidores hasta en un 32%, frente a la segmentación demográfica tradicional.
Estas son algunas de las conclusiones vertidas en el estudio «Building Consumer’s Connections Through Contextual» («Construir las conexiones del consumidor a través de la publicidad contextual»), elaborado por Seedtag y Nielsen.
Para llevarlo a cabo, se realizó una encuesta a 1.800 consumidores británicos teniendo en cuenta tres categorías: ‘Automoción’, ‘Alimentación y Bebidas’ y ‘Belleza’. Los consumidores se agruparon según cuatro estrategias de segmentación empleadas en el sector publicitario: ‘sin segmentación’, ‘basada en el interés’, ‘basada en datos demográficos’ y ‘contextual’.
Mayor receptividad
La segmentación contextual ha demostrado tener éxito a la hora de generar una mayor influencia en la intención de compra, especialmente en el caso de productos de nicho o especializados. Esto sugiere que, cuando los anuncios se posicionan en un entorno contextual, es más probable que el consumidor actúe, por ejemplo, comprar algo o buscar más información sobre el producto.
A su vez, los consumidores expuestos a publicidad contextual se mostraron un 85% más receptivos a la hora de recibir futuros anuncios en comparación a cuando recibieron publicidad sin segmentación, dato aún más evidente en el caso de productos relacionados con la categoría de belleza.
Por tanto, los consumidores expuestos a anuncios segmentados de forma contextual fueron un 40% más receptivos que los expuestos de forma demográfica, y un 28% más que los expuestos únicamente por su interés en la categoría. Además, los consumidores expuestos mediante segmentación contextual se mostraron menos irritados hacia el contenido; en cambio, los dirigidos en función de parámetros demográficos o de se sintieron un 60% más irritados.
Analizando estereotipos
Los estereotipos fue otro punto analizado en la investigación y se descubrió que la segmentación contextual permite llegar públicos que, mediante el enfoque tradicional, podrían pasarse por alto. Esto significa que este tipo de segmentación ofrece la posibilidad de dirigirse a un público distinto, lo que a menudo lleva a los consumidores a querer buscar e informarse sobre otros productos.
La categoría de belleza, por ejemplo, se dirige tradicionalmente a mujeres. Sin embargo, los resultados indicaron que al menos el 70% de los hombres que recibieron esta publicidad contextual considerarían la posibilidad de comprar productos de belleza sostenibles u orgánicos/naturales.
«En un momento en el que los consumidores se preocupan cada vez más por su privacidad y la calidad de los anuncios que se les ofrecen, es evidente que las estrategias de segmentación tradicionales ya no son suficientemente eficaces para generar compromiso. Esto ha provocado que la segmentación contextual sea más relevante que nunca», declara Borja Fernández, country manager de Seedtag para España.