Philips se desprende de uno de los pilares básicos de su negocio. La compañía ha hecho efectiva la venta de su división Domestic Appliances a la firma de inversión global Hillhouse Investment, a cambio de 3.000 millones de euros en efectivo.
La firma holandesa ha puesto fin a lo que suman 95 años de trayectoria en la industria de los electrodomésticos. Después de anunciar en marzo de este año la decisión de desinvertir en su filial Domestic Appliances, la compañía finalmente ha vendido dicho negocio a la firma de inversión Hillhouse Investment, por ingresos en efectivo de cerca de 3.000 millones de euros, descontados impuestos y costes asociados a la operación.
No obstante, el valor total de la transacción real asciende a 4.400 millones, ya que tiene en cuenta el acuerdo de licencia de marca adicional suscrito en la venta, y que permitirá a la compañía obtener durante 15 años pagos de licencia que sumarán un total de 700 millones de euros.
Según ha explicado Frans van Houten, CEO de Royal Philips, esta operación les permite avanzar en su estrategia de ofrecer “soluciones integradas que ayuden a los clientes de atención médica profesional a lograr el Cuádruple Objetivo y a los consumidores, a cuidar de su salud”.
Mientras que Henk de Jon, CEO de la unidad de Domestic Appliances, ha recordado que se encuentran en una “excelente posición para continuar aportando innovaciones significativas al hogar del consumidor en áreas como la cocina, el café y el cuidado de la ropa y el hogar”-
Tras la venta del negocio de Domestic Appliances, el negocio de cuidado personal de Philips – que está valorado en 3.200 millones de euros- tendrá un papel destacado en la estrategia de salud de la compañía, integrada mediante productos y soluciones que faciliten hábitos de vida sanos y prevengan enfermedades.