Nurettin Acar, CEO de Ikea España desde 2021, ha dejado sus funciones de consejero delegado y chief sales officery. Hasta la llegada de un nuevo CEO, la directora financiera de la empresa en nuestro país, Fátima García de Viedma, hará las funciones de manera temporal.
Según ha adelantado el medio Economía Digital, la salida de Acar forma parte del proceso de rotación de consejeros delegados en los países donde la empresa sueca está operando. Una estrategia de la compañía para que los CEO lideren entre tres y cinco años. Afirmación que ha sido confirmada por el propio Acar, recoge la cabecera.
“Ha llegado al final de mi periodo aquí en España, así que hemos acordado con Ikea finalizar el contrato”, ha recogido el diario digital.
En el perfil de LinkedIn, el directivo ha compartido que es autónomo desde febrero con las funcioens de experienced intenational retail manager, CEO y transformative business leader. Inicia así una nueva etapa, tras más de 24 años en Ikea.
A finales de 2021, Nurettin Acar inició las funciones de consejero delegado de Ikea en España, después de sustituir a Petra Axdorff que anunció su salida en ese momento, tras nueve años en la empresa. Acar llegó a nuestro país en septiembre de 2019 como responsable de las tiendas de Madrid, Coruña, Asturias, Valladolid y Barakaldo, así como también era miembro del comité de dirección.
En 2001, el profesional inició su aventura en Ikea, entrando al equipo de Ventas en Suiza. De ahí, pasó a ser responsable de la tienda Ikea Pratteln y más tarde la de Ikea Dietlikon. En 2005, se trasladó a Turquía como director general adjunto hasta que en 2017 asumió la dirección de las operaciones de la enseña en este mercado, función desempeñó hasta su llegada a España.
Licenciado en Economía, Acar ha trabajado como vendedor de alfombras en un supermercado local de Suiza, antes de llegar al grupo, así como también fue concejal del Wil, en el cantón de Zúrich. En este parlamento regional, ejerció como responsable de inmigración y del comité de operaciones técnicas de la ciudad, así como de voluntario para ayudar refugiados, de la mano de ONGs, durante la Guerra del Golfo.
