Meta AI promete campañas sin creatividades ni segmentación bajo un modelo 100% orientado a negocio

Zuckerberg quiere redibujar el futuro de la publicidad. Meta AI plantea un nuevo paradigma automatizado en el que bastará con definir un objetivo de negocio para activar campañas publicitarias, revolucionando procesos clave de agencias y marcas.

La inteligencia artificial de Meta podría suponer uno de los mayores puntos de inflexión en la industria publicitaria en los últimos años. Así lo expuso recientemente Mark Zuckerberg en una entrevista con Stratechery, donde desgranó cómo Meta AI —el nuevo asistente de inteligencia artificial integrado en WhatsApp, Messenger e Instagram, y disponible como app independiente— aspira a transformar por completo la forma en la que las marcas planifican, ejecutan y optimizan sus campañas.

El planteamiento es disruptivo: los anunciantes podrán prescindir de la creación de creatividades y de la definición de audiencias. Solo tendrán que establecer un objetivo de negocio; a partir de ahí, la IA se encargará de generar los contenidos, segmentar automáticamente y optimizar en tiempo real, bajo un modelo 100% orientado a resultados.

Zuckerberg lo describe como “el agente de negocios definitivo”, un asistente capaz de automatizar tareas que, hasta ahora, exigían la intervención directa de creativos, planners y expertos en medios. De materializarse, esta visión podría modificar sustancialmente el día a día de agencias de publicidad, particularmente en áreas como creatividad, paid media y performance.

Publicidad conversacional, automatización total y nuevas oportunidades para pymes

La propuesta de Meta AI se apoya en su integración directa en canales de uso masivo como WhatsApp e Instagram, lo que facilitaría experiencias conversacionales fluidas entre marcas y usuarios. Esta evolución daría paso a una publicidad más contextual, basada en la interacción directa y continua, con un fuerte componente de personalización gracias a la memoria contextual de la IA.

Además, el enfoque baja las barreras de entrada para pequeñas empresas sin recursos técnicos o creativos, al permitirles lanzar campañas con apenas unos clics. Esta simplificación del funnel publicitario podría estimular el crecimiento de la inversión en mercados menos desarrollados en automatización.

La app de Meta AI permitirá incluso consultar qué sabe de un usuario en base a su actividad en redes sociales, abriendo la puerta a una mayor transparencia algorítmica y, potencialmente, a una nueva forma de retroalimentación publicitaria.

La mensajería comercial, un eje de monetización en expansión

Zuckerberg también subrayó el papel de la mensajería como nuevo canal de conversión. En mercados como Tailandia o Vietnam, el comercio vía apps de mensajería ya representa un porcentaje significativo del PIB. Meta aspira a replicar ese modelo en Occidente gracias a agentes virtuales basados en IA, que gestionarán atención, ventas y soporte bajo un esquema freemium sin coste inicial para el anunciante.

Este modelo redefine la lógica del funnel y plantea nuevas formas de atribución, seguimiento y rentabilidad para las marcas, desdibujando la frontera entre marketing y servicio al cliente.

Open source, metaverso y la visión a largo plazo

Más allá de la publicidad, Zuckerberg defendió la apuesta de Meta por los modelos open source con LLaMA, con el objetivo de promover un ecosistema abierto, más eficiente y menos dependiente de plataformas cerradas. En paralelo, reafirmó su apuesta por las gafas inteligentes como el dispositivo que catalizará la integración entre IA y vida diaria, por delante incluso del metaverso, que sigue en desarrollo.

En conjunto, Meta está diseñando una arquitectura tecnológica que combina inteligencia artificial generativa, mensajería instantánea, plataformas sociales y dispositivos portables. Una visión que no solo redefine el concepto de publicidad digital, sino también el papel que pueden jugar las agencias en un entorno donde la automatización total empieza a ser una posibilidad tangible.