La Sociedad Española de Neurociencia e Ikea se unen para estudiar la actividad del cerebro expuesto al color

Los resultados de este estudio reflejan la importancia de los colores en la atención, procesos hormonales o en las emociones.

Presentación de una revisión bibliográfica que analiza las diferentes sensaciones que produce visualizar los colores rojo, verde y azul.

Ikea se unió a la Sociedad Española de Neurociencia (SENC) con el objetivo de hacer una revisión bibliográfica de 47 estudios científicos rigurosos que analizan la actividad cerebral del ser humano ante la percepción de diferentes tonalidades/colores, para posteriormente aplicarlo al hogar.

El estudio “La percepción visual de los colores y la actividad cerebral”, presentado en rueda de prensa, supone la primera revisión del contenido científico publicado hasta la fecha sobre la activación cerebral distribuida. La percepción del color es una característica general de nuestra experiencia neurológica, con un papel clave en muchos aspectos del comportamiento humano y reflejan  la importancia de los colores en la atención, procesos hormonales o en las emociones

Esa experiencia perceptiva se recibe al combinar varios estímulos que percibimos por los ojos pero que no solo depende de la longitud de onda de luz asociada a un color, sino que depende también de la orientación del objeto, el contraste, el movimiento o forma, entre otras características. Las frecuencias de la actividad cerebral se agrupan y nombran en rangos concretos que abarcan desde las frecuencias más bajas a las frecuencias más rápidas.

Dependiendo de qué rango de frecuencias predominen, se darán diferentes estados de comportamiento general del individuo. “Las ondas de baja frecuencia se relacionan con la relajación, la introspección y meditación, mientras que las de alta frecuencia están implicadas en concentración, atención, ansiedad y actividad”, explica la doctora Teresa de los Reyes de la SENC.

Además, esa información visual del color está estrechamente relacionada con cómo nuestro cerebro interpreta diferentes propiedades de lo que percibe, como la intensidad del color, la temperatura y brillo de la luz, el contraste. Por tanto, el procesamiento que hace nuestro cerebro del color es un proceso complejo que ocurre de manera distribuida, es decir, que la información alcanza diferentes estructuras cerebrales en las que cada una hace una función en paralelo y luego convergen para producir la percepción.

Por otra parte, en la revisión realizada por la SENC sobre la activación cerebral y la percepción del color siguiendo el modelo RGB, se desprende que, los colores proporcionan una información muy relevante en el aspecto atencional, ya que un color puede aumentar la atención hacia un objeto determinado, lo que da lugar a una construcción del espacio visual específica. En un estudio realizado en humanos se ha descrito que el componente de color influye en la atención visual incluso más que en el lenguaje.

Por ejemplo, algunos grupos de estudio apuntan que las tonalidades cálidas generan una mayor rapidez en la búsqueda visual de los participantes en comparación con otras tonalidades. Sin embargo, de manera prolongada, la exposición a luces cálidas (longitudes de onda del espectro visible del rojo) tiene un efecto relajante respecto a otras tonalidades.

El azul, por su parte, se ha relacionado con estados de mayor relajación. Además, la exposición prolongada a una luz azul con un grado de luminosidad no excesivo podría relacionarse con un estado de activación y mejor rendimiento cognitivo. Finalmente, el color verde tiene efectos atencionales similares al color rojo.

En otro orden de cosas, se realizó un estudio a 370 huéspedes de múltiples nacionalidades de un hotel, a los que se pidió que clasificaran seis fotos de la misma habitación de hotel, pero con una temática de color diferente en cuanto a las sensaciones que les proporcionaban. Así, se utilizaron seis temas de color que consistían en los tres colores primarios (es decir, rojo, verde y azul) y sus colores complementarios (es decir, naranja, amarillo y morado). El rojo, el naranja y el amarillo representaban colores cálidos, mientras que el verde, el azul y el morado representaban colores fríos.

Ikea y el uso del color

El color forma parte de la identidad de Ikea y Almudena Cano, directora de Diseño Retail e Interiorismo de Ikea en España, hizo un recorrido por los principales hitos de la historia del diseño que han supuesto una clara influencia a la hora de diseñar los productos de la marca en lo que a color se refiere. Además, quiso destacar que “la naturaleza es una clara seña de identidad de Ikea y su diseño porque siempre hemos querido llevarla al interior de los hogares usando materiales, patrones y por supuesto colores¡ inspirados en ella”.

Nueva colección Tesammans: el color como protagonista

Ikea presentó la colección Tesammans de la mano de sus creadores, una edición limitada que llega el 2 de mayo a las tiendas en España y que ha sido desarrollada por el estudio holandés Raw Color. Daniera ter Haar y Christoph Brach son quienes están detrás de este estudio, una pareja que se dedica al diseño gráfico, la fotografía y el diseño de productos, y para los que el color representa un papel fundamental.

Su trabajo se ha expuesto en galerías y museos de todo el mundo, como The Aram Gallery, el Cooper Hewitt Museum y el Stedelijk Museum de Ámsterdam, entre otros. Tesammans está formada por 18 productos que nacen de la combinación del conocimiento sobre el hogar de Ikea y la experiencia de Raw Color, y presenta diversas combinaciones de colores.

En sintonía con el estudio de la SENC, desde Raw Color indican que “el color nunca está solo, un color solo es lo que es cuando está junto a otros. Por ejemplo, un rojo al lado de un rosa conservará la tonalidad, pero al lado de un azul parecerá más intenso y creará un contraste mayor”.

Además de la interacción entre los colores, la colección Tesammans tiene que ver con la interacción entre diferentes objetos. Muchos artículos de la colección vienen juntos: el par de jarrones o las botellas y los vasos, por ejemplo. “Puedes colocarlos al lado, o unos encima de otros, y cambiar la expresión visual”, añaden. También se incluyen textiles, muebles auxiliares como mesitas y cajonera, así como lámparas.