En el caso de los medios interactivos, es probable que se haya asentado una gestión más tecnificada de las campañas compradas en distintos formatos y emitidas en función del valor que cada impresión aporte al editor y la eficacia que aporte a la marca. Vamos, como lo que ahora hacen las teles a manita pero con claridad, limpieza y fair play.
Un entorno tecnológico como Internet necesita imperiosamente una venta ayudada por la tecnología para gestionar todo el inventario que es comprado bajo fórmulas distintas a las conocidas “tantas impresiones, en tal hueco de página, emitidas entre tal día y tal día”; todo eso que llamamos performance, real time bidding, bulk, yield y demás palabros raros, debe ser gestionado por sistemas inteligentes al servicio de los departamentos comerciales.
Al César lo que es del César y a la tecnología lo que es de la tecnología. ¿Lógico, no? Feliz 2012 y tranquilos, que los mayas, como adivinos, tampoco eran gran cosa.