La compañía de automoción Honda aspira a caracterizar su cadena de suministro con el sello de cero emisiones para 2050, de ahí que haya pedido a sus proveedores que se marquen como objetivo la reducción de su huella de carbono un 4% este año, y que presenten un calendario de cómo planean convertirse en emisores cero para 2050.
Según ha informado el diario asiático Nikkei, la firma japonesa ha enviado una carta a los proveedores con los que trabaja, explicándoles sus ambiciones en términos de sostenibilidad.
Honda, en concreto, ha pedido a los fabricantes de los componentes de sus vehículos la reducción de sus emisiones de dióxido de carbono en torno a un 4% frente a las emitidas en 2019 y les ha pedido que envíen un calendario de cómo conseguirán que, para 2050, todas ellas sean neutras en emisiones de carbono.
La compañía ha ofrecido una serie de guías para animar a esta reducción, que varía en función de las partes producidas y el tamaño de cada proveedor. Y ha informado que les ofrecerá soporte, a través de la cesión de ingenieros o la ayuda para establecer el calendario.
Honda se ha marcado como objetivo alcanzar las cero emisiones netas en todos sus productos y actividades corporativas para 2050. Para su negocio principal de automóviles, ha establecido el objetivo de vender nuevos coches impulsados exclusivamente por baterías o células de combustible para 2040. Esto está en línea con el objetivo del gobierno japonés de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050.
Tendencia en el sector
Honda es el primer fabricante japonés en anunciar un objetivo de reducción de la huella de carbono de sus proveedores a largo plazo, aunque se mantiene en la línea de otras compañías del sector.
Toyota ha pedido a los fabricantes de sus componentes la reducción de sus emisiones de carbono en un 3% en 2021 frente al año anterior, mientras que Nissan ya ha informado que planea pedir a sus proveedores disminuir sus emisiones para el próximo año – sin detallar, no obstante, la cuantía-. En Europa, recientemente Volkswagen lanzó una iniciativa donde pedía a sus fabricantes emplear fuentes de energía renovables en su producción.