Google ha anunciado el retraso de la suspensión de Universal Analytics 360, la versión para grandes empresas de Google Analytics, fechada para octubre de 2023, tres meses después de la retirada de Universal Analytics por Google Analytics 4. Será finalmente en julio de 2024.
Según ha explicado Rusell Ketchum, director de gestión de producto de Google Analytics, la compañía ha decidido retrasar la transición a la nueva versión de su herramienta de medición a aquellos clientes que por su tamaño tienen más problemas para abordar el cambio.
“Para los clientes con la configuración más sofisticada, que son aquellos que usan Google Analytics 360, hemos extendido el periodo de suspensión, ya que como sus implementaciones son tan complejas, necesitan más tiempo para recoger data en ambas plataformas”, haciendo alusión a Universal Analytics y Google Analytics 4.
Al mismo tiempo, han informado que a comienzos del próximo año pondrán a disposición de todos los clientes la automatización de su Asistente de Instalación de Google Analytics 4 para asegurar que todos los usuarios de la herramienta tengan funcionando correctamente la nueva versión.
Google Analytics 4
El pasado marzo Google anunció el final de Universal Analytics, la versión en la que se había basado su herramienta de medición, para ser reemplazado por Google Analytics 4, actualización diseñada para adaptar Analytics a un ecosistema digital más respetuoso con la privacidad de los usuarios.
Entre las novedades que presenta Google Analytics 4, destaca el final del almacenamiento de direcciones de IP de usuario para pasar a emplear direcciones IP anonimizadas y el uso de modelos probabilísticos en lugar de los basados en datos determinísticos. Además de la incorporación por defecto del modelo de atribución data-driven y la opción de obtener insights predictivos sobre el comportamiento del usuario y las conversiones, que permiten crear nuevas audiencias de usuario con probabilidad de compra o de conversión.
Se suman nuevos controles de privacidad a nivel país, que posibilitarán a agencias y anunciantes gestionar y minimizar la recogida de datos a nivel usuario – como cookies o metadata- al tiempo que preservan las funcionalidades clave de la medición.