Apenas una semana después de anunciar la salida de unos 1.000 empleados a nivel global debido a la reducción de los equipos de Pixel, Nest, Fitbit, realidad aumentada y su asistente de voz, Google ha informado a sus empleados de que los recortes continuarán, esta vez, en la división de ventas de publicidad.
Según ha informado Business Insider, que ha tenido acceso al escrito remitido por Philipp Schindler, chief business officer de Google, la compañía prescindirá de un centenar de empleados de la unidad de ventas de publicidad, cuya plantilla asciende a unas 30.000 personas, debido al proceso de reestructuración que está llevando a cabo en esta área.
En ese proceso de reestructuración, la firma con sede en Mountain View está trasladando empleados de la división enfocada a tratar con los grandes anunciantes al área de soluciones de cliente, dirigido a compañías con menos escala.
Según los testimonios de actuales y antiguos empleados de la Big Tech, son cada vez menos los grandes anunciantes que necesitan los recursos de Google. De ahí que ahora la compañía se fije en aquellas empresas con presupuestos más pequeños, que sí siguen necesitan las distintas soluciones publicitarias que ofrece Google.