“El valor diferencial de una feria seguirá siendo el contacto y el encuentro presencial…adaptado a las nuevas circunstancias”

La crisis sanitaria del coronavirus ha golpeado con extrema dureza a la organización de ferias, congresos, convenciones y actos públicos en general, paralizando el sector casi por completo. Fira Barcelona, sin embargo, no se ha detenido, y hemos visto como durante este periodo ha cambiado su actividad habitual por otra absolutamente social y solidaria.

Ahora, sin viajes, con reglas de distanciamiento social e incertidumbre sobre el futuro de los eventos multitudinarios, Fira Barcelona se enfrenta al calendario que marcará el inicio de la nueva normalidad para el mundo ferial. Persiste el factor impredecible del miedo al contagio y muchas otras dudas, pero hay que arrancar de nuevo la rueda porque el “show debe continuar”.