‘Elegí un mal día’, por Fernando Montañés

"Sorprende que en España las marcas más valiosas y las que más crecen son las financieras y las energéticas, dos sectores que no destacan precisamente por su buena imagen pública y su atención al cliente, que se han forrado en la crisis y no tienen el mínimo reparo en aprovechar cualquier ocasión para mejorar sus resultados a costa de los ciudadanos". Fernando Montañés comenta la actualidad del sector en la sección 'El Confidencial', de IPMARK.

Fernando Montañés.

Elegí un mal día… Uno de los personajes más divertidos de “Aterriza como puedes” se pasa la película convencido de que ha elegido un mal día para dejar los vicios más variados. Efectivamente, es mucho más complicado mantener el optimismo, la fuerza de voluntad, la confianza y la tranquilidad cuando los acontecimientos externos nos están empujando a tomar decisiones difíciles y complejas. Los datos del 2021 han sido bastante positivos en general, y la inversión publicitaria ha seguido una senda muy buena hacia la recuperación, aunque todavía falta mucho para conseguir las cifras con las que terminó el año 2019. Los datos de enero de 2022 también reflejan que el año comenzó con fuerza, con un crecimiento del 11,1% según Infoadex, y datos muy positivos en todos los medios salvo Revistas y Televisión. Pero si ya había algunos nubarrones, como las dificultades logísticas que frenaban el crecimiento de algunos sectores, el alto precio creciente de la energía y, sobre todo, la inflación en porcentajes que no se veían desde hace décadas; estalló la gran tormenta con la guerra y la invasión de Ucrania por Rusia, que hace volar drásticamente cualquier previsión que pudiera haberse hecho anteriormente. Por desgracia, poco valen los esfuerzos ante una catástrofe que tiene consecuencias brutalmente imprevisibles, pues plantearse lo que puede ocurrir en el sector del marketing, la publicidad y la comunicación parece obsceno ante el dramatismo absoluto que supone una guerra absurda y sin sentido. Solo cabe desear que acabe lo antes posible y que tenga las mínimas consecuencias para el pueblo ucraniano.

Ganas de salir. El anuario de audiencia de TV de Kantar confirma que la pandemia nos dejó unas enormes ganas de salir de casa y estar en la calle, lo que implicó una reducción del consumo de televisión de nada menos que 37 minutos diarios. Tampoco hay que exagerar, pues en 2021 los españoles seguimos estando una media de 213 minutos al día frente al televisor, más de 3 horas y media. Kantar refleja que los niños y jóvenes son “los que más usan la tele para no verla”, y darle otros usos como los videojuegos. Por no hablar que para muchos de esos jóvenes la tele está más relacionada con la pantalla del ordenador y las plataformas como Netflix antes que con las clásicas cadenas de toda la vida. Otro dato a tener en cuenta: según Kantar, el sector de Automoción no está entre los cinco más publicitarios de la tele, puestos que ocupan alimentación, distribución y restauración, belleza e higiene, deportes y tiempo libre y salud. Y es que, como decía aquel clásico anuncio de Audi, los coches ya no son lo que eran.

Zara y las demás. Interbrand asegura un año más que la marca española más valiosa es Zara, seguida a bastante distancia por Movistar, Santander, BBVA y Caixabank. Mucho banco, y sobre todo destaca el incremento del 43% de Caixabank tras merendarse a Bankia. Las marcas españolas cuyo valor ha crecido más tras el banco son Mercadona, un 28%; Iberdrola, el 19%; Endesa, un 17%; Repsol y el Real Madrid, un 12% cada una. En este caso priman las energéticas. Del ranking de Interbrand sorprende precisamente que en España las marcas más valiosas y las que más crecen son las financieras y las energéticas, dos sectores que no destacan precisamente por su buena imagen pública y su atención al cliente, que se han forrado en la crisis y no tienen el mínimo reparo en aprovechar cualquier ocasión para mejorar sus resultados a costa de los ciudadanos. O quizá estoy equivocado, y son los sectores con mejor imagen gracias a su preocupaciones y desvelos por hacer el bien sin mirar a quién.