El Corte Inglés ha presentado un plan de bajas incentivadas para trabajadores mayores de 59 años. A este podrán acogerse voluntariamente entre 500 y 600 empleados que cumplan los requisitos que se acuerden con la representación legal de los trabajadores.
A su vez, el gran almacén ha presentado además el plan de reordenación de la plantilla de los servicios centrales (En Madrid) y regionales, para que sean trasladados a los establecimientos comerciales. La compañía busca “reforzar las tiendas, atender la buena evolución de las ventas y mejorar la atención y servicio al cliente”.
La modernización de los procesos y los sistemas que ha implementado la empresa en los últimos meses han impulsado una optimización de la gestión. Esto “permitirá dicha reducción de los servicios centrales en beneficio de los establecimientos comerciales”, ha señalado la compañía en un comunicado.
Esta iniciativa será pactada, coordinada y gestionada con los representantes de los trabajadores. Las condiciones de los traslados de oficinas a tiendas deberá tratarse en la negociación con los sindicatos
La compañía asegura que el plan se realiza bajo la premisa de mantener el empleo, aparte de dar un tratamiento especial a los empleados mayores de 59 años.