El branding en España ha evolucionado en los últimos años. Desde 2013, la gestión de esta disciplina ha incrementado un 40% su importancia en el desarrollo de negocio y las previsiones auguran un futuro de buenos números. Datos recogidos del quinto estudio sobre la salud del branding en nuestro país, BrandPulse, elaborado por la Asociación Española de Branding (AEBRAND) y el Foro de Marcas Renombradas Españolas (FMRE).
Acerca de estos resultados, Acute Brand Studio ha analizado la evolución del branding en la última década. En 2013, Mario Vega, Jose Santana y Romain Herfort unieron sus fuerzas y fundaron el estudio de branding independiente con sede en Madrid.
“Afortunadamente cada vez son menos las personas que reducen el branding al diseño de logotipo y de imagen corporativa, y entienden que el branding es consultoría de marca y que tiene que ver con estrategia de negocio, cultura empresarial y experiencia de cliente, entre otras muchas cosas”, explica Romain Herfort, cofundador y director ejecutivo del estudio.
Desde la creación de Acute Brand Studio, ha habido un cambio de paradigma importante en el sector. Cada vez son más las empresas que entienden esta disciplina como un impulsor de la transformación del negocio y ven en la consultoría de marca una oportunidad única para oficializar un cambio de rumbo de la compañía. Como consecuencia de ello, la dirección de marketing ha dejado de ser el único interlocutor válido para dejar más espacio al equipo de dirección.
Digitalización
Por otra parte, el diseño de producto digital se ha profesionalizado mucho en estos últimos 10 años, que empieza a ser una puerta de entrada para muchos proyectos de branding. Esto implica una mayor competencia a la hora de captar la atención del usuario sometido a muchos impactos publicitarios. “Muchos negocios puramente digitales no diferencian la marca de la interfaz digital y crean o reforman las dos cosas a la vez”.
Valores sociales y experiencia de usuario
En este período, también los valores sociales y ambientales han ganado peso en la sociedad, aspectos importantes que influyen en la marca y en el valor del negocio. Además, la experiencia del cliente se ha vuelto necesaria para la construcción de marca. “Los consumidores no sólo son exigentes y demandan un producto de calidad, cada vez más requieren una experiencia relacional auténtica con las empresas”. Las marcas tienen que garantizar que la experiencia sea consistente y coherente en todos los canales.
El branding sigue evolucionando con el paso del tiempo y las marcas van de la mano. Las reglas del juego han cambiado y sobrepasan la frontera corporativa y conservadora para llegar a la parte más humana, social y universal de una marca.