La creciente inflación vivida en estos últimos meses no solo afecta al bolsillo de los consumidores. También, a su estado de ánimo. Un 95% de compradores afirma sentirse preocupado por la situación y un 55%, frustrado o enfadado por este contexto económico.
Según el análisis realizado por la consultora de transformación digital The Cocktail, la inflación vivida desde la segunda mitad de 2021 está originando frustración entre los consumidores. Con un 95% de encuestados preocupados por la situación, más de la mitad (55%) afirma sentirse frustrado o enfadado por este contexto de inflación, que en mayo se ha situado en el 8,7%.
“Existe la sensación generalizada de que lo que está pasando con la inflación es injusto con nosotros, de ahí que los encuestados manifiesten sentirse con ira. Todo lo que nos toca el bolsillo provoca que nos enfademos”, ha explicado Álvaro Marín, responsable de behavioral economics en The Cocktail.
Además de preocupación, se muestra pesimismo entre los consumidores. Un 57% de encuestados está convencido de que la inflación en España, lejos de tocar techo, seguirá teniendo una tendencia ascendente, y prevén que a finales de este año los precios pueden encarecerse hasta en un 15%.
Ante esta situación, un 80% asegura que prevé dejar de consumir, algo que se notará, sobre todo, en los productos, servicios y actividades más relacionados con el ocio y el bienestar que con las necesidades básicas.
Preguntados a los españoles qué bienes, en concreto, dejarían de consumir ante esta escalada de precios, electrónica y arte serían las primeras renuncias, con más de un 70% y un 60%, respectivamente. Le sigue viajes, con un 50%, seguido de bares y restaurantes.
En el lado opuesto, Telecomunicaciones, con menos de un 20% que renunciaría a su móvil y a internet; productos para bebés – casi un 30% tomaría la difícil decisión de dejar de comprarlos-; el vehículo – algo más del 30% optaría por otro medio de transporte más económico-.y las mascotas – menos del 10% ha reducido su gasto en esta partida-.