Dentro de este nuevo concepto de web, existe una tendencia que podríamos denominar Conexiones de Actualización… cuanto más nos conectamos, más optimizamos (nuestro tiempo, nuestra trayecto en coche, nuestra salud, etc.). Estar conectado nos ayuda a adaptarnos a muchas situaciones del día a día. Cada vez las personas nos parecemos más a los ordenadores, nos actualizamos continuamente, online, como cuando apretamos el botón de actualizar en un sitio web.
Por ejemplo, ya existen varios sistemas que permiten optimizar los tiempos de espera (en consultas/centros médicos, administraciones públicas, etc.). Uno de ellos, TechnowaiT en Australia, te ofrece la posibilidad de registrarte al llegar a la consulta del médico/hospital y ser avisado en tu móvil media hora antes de que llegue tu turno.
Otro ejemplo de cómo la web nos ayuda a optimizar, en este caso la salud, es Philips Direct. Este servicio nos vende un monitor de actividad que debemos llevar encima y, vía conexión web a su servicio, nos hace un diagnóstico y sugiere un plan de actividad para mejorar nuestra condición física. Además, ofrece un entrenador personal (todo vía web, por supuesto) que nos asesora en todo momento.
Un desarrollo a futuro de este concepto de optimización será la transformación de los espacios en los que trabajamos y/o vivimos. En Japón, ya existen espacios interiores inteligentes que se adaptan al nivel de actividad y el uso que se les está dando. Las luces, la temperatura, etc., cambian automáticamente en función de la información que reciben los sensores instalados. Por supuesto, uno de los criterios básicos es maximizar el ahorro de energía en momentos de poca/nula actividad. Es el mismo concepto del coche híbrido aplicado a los espacios interiores.
Si quiere ganar tiempo y salud… conéctese.
Norman Kurtis es director general de Ipsos España.