Coca-Cola ha presentado en Londres las primeras botellas fabricadas en el mundo con un 25% de plástico reciclado procedente de basura marina, recogida en el proyecto ‘Mares Circulares’, iniciativa que tiene como fin limpiar las costas y los fondos marinos. Por ahora, esta innovación solo es un prototipo, apto para el consumo alimentario, pero la previsión de la enseña es lanzarlo al mercado en 2020.
Ioniqa Technologies, Indorama Ventures y Coca-Cola han trabajado conjuntamente en desarrollo de este nuevo prototipo sostenible. 300 botellas de 250 ml han sido fabricadas, procedentes de playas y fondos marinos de España y Portugal. La botella está fabricada con un 25% de plástico PET, pero el objetivo de la empresa es llegar al 100% lo antes posible.
En enero de 2019, Ioniqa Technologies entró en el proyecto de la marca de bebidas para facilitar el desarrollo de la tecnología presentada por esta última, diseñada para producir PET reciclado de alta calidad apto para uso alimentario a partir de residuos difíciles de reciclar. Así, de las 2,1 toneladas recogidas por ‘Mares Circulares’ en 2018, 1,3 toneladas fueron enviadas para ser procesas y reconvertidas. Junto a la tecnológica, Indorama Ventures ha sido la encargada de convertir el material en producto apto para el consumo.
Técnica innovadora
La nueva técnica se basa en la despolimerización, un proceso químico que permite descomponer y mejorar el PET de baja calidad, eliminando impurezas y convirtiéndolo en otro de calidad y apto.
La presentación europea de este gran avance de la firma también aterriza con otras novedades. A nivel nacional, Coca-Cola Iberia adelanta su objetivo de que todas sus botellas de plástico estén fabricadas con un 50% de PET reciclado en 2022, tres años antes de lo previsto.