Si bien las campañas de marketing online tienen especial demanda en la actualidad, la publicidad offline se mantiene como estrategia eficaz para captar la atención del público objetivo y fidelizar a los clientes. En este sentido, un buen regalo para eventos supone la oportunidad de potenciar la imagen de la empresa o afianzar la marca de cara no solo a la audiencia, también frente a los trabajadores, proveedores y asociados.
Más allá de la calidad de los productos, el precio y la accesibilidad, la fidelidad de los consumidores está sujeta a la capacidad de la empresa de crear un vínculo emocional. En este sentido, invertir en artículos básicos como unos llaveros personalizados simplifica el camino hacia la meta de convertirnos en una “lovemark”. Además, desarrollar una buena acción promocional refuerza el branding, añade valor a la propuesta e incrementa la visibilidad.
Reconocimiento y herramientas de comunicación
En el entorno publicitario, la construcción de la marca depende, en gran medida, de la habilidad para definir la imagen o idea a través de la cual la empresa será reconocida por la audiencia y se diferenciará de la competencia. A diferencia de los folletos y anuncios, los regalos personalizados son objetos cotidianos y de interés para los consumidores. Mediante su uso diario, se genera impacto sobre la mente de los usuarios y se activa el recuerdo de la marca.
De esta manera, una vez que lo necesite, pensará en el producto o servicio ofrecido. El uso de regalos para eventos brinda la posibilidad de la comunicación con la audiencia y mejora la reputación. Para ello, es necesario que la aplicación de la estrategia se acompañe de la disponibilidad de canales que permitan la multidireccionalidad de la comunicación.
Los consumidores asumen el obsequio como muestra del compromiso de la empresa, y genera un sentimiento de agradecimiento. Sea que lo vayan a utilizar o no, todo lo gratis siempre es bien recibido. Finalmente, al tratarse de un regalo, el público no siente que se trata de publicidad, sino que el mensaje impacta a nivel del subconsciente. En el sector publicitario, este método recibe el nombre de promoción subliminal.