La digitalización de la sociedad está incrementando la comunicación de los consumidores con las marcas a través de distintos canales, para tener una atención inmediata en el proceso de compra. Chatbots o interfaces de voz son algunas de las soluciones de las empresas para ofrecer una respuesta en tiempo real.
Este servicio, conocido como c-commerce (o comercio conversacional), está creciendo en España, como recoge la investigación ‘Industry Micro-Shifts’, encargada por Facebook y elaborada por Kantar Profiles. El 43% de las personas encuestadas entre mayo y agosto de 2020 reconoció haber hecho una compra a través de un servicio de mensajería por primera vez en el último mes y el 20% aseguró haberlo hecho a través de un asistente de voz.
Este crecimiento del comercio conversacional presenta cifras elevadas en el medio plazo. Se prevé que en los próximos cuatro años crezca más de un 590% y que todos los chatbots representen el 50% de la inversión en esta estrategia de marketing, según la agencia Juniper Research.
Aumenta el 90% de los procesos de CRM y marketing
La atención al cliente a través de herramientas de inteligencia artificial y mensajería instantánea permiten aumentar las ventas. Con 15.000 millones de dispositivos móvil en todo el mundo, esta herramienta de marketing se posiciona como una oportunidad esencial para las empresas grandes y pequeñas. El primer paso para implementar correctamente el comercio conversacional se debe identificar cuáles son los intereses del público objetivo, así como las aplicaciones más utilizadas para interactuar y comprar online.
Se establece un trato más humano con el target concreto, aumentando el engagement, así como también resuelve las interacciones de forma automática, ofreciendo soporte en cualquier momento y lugar. En concreto, el c-commerce mejora el customer experience del cliente en, al menos, un 30%; automatiza el 90% de los procesos de CRM y marketing, tales como correos electrónicos, SMS y WhatsApp; y es 100% medible a tiempo real.
Esta herramienta está disponible para empresas de gran tamaño y pequeña, al no requerir de una gran inversión económica. “El c-commerce se presenta como una alternativa ideal cuando el público tiene dudas en una compra online, y antes de que abandone el carrito o desista de su compra, lo ayudamos para que pueda terminarla”, cuenta Soledad Torres, sales director en Convertia.