Son muchas las agencias que a lo largo de los años han ido dando con nuevos modelos y formas de trabajo que hacen evolucionar el mercado en una dirección en la que priman la integración y el servicio al cliente, pero la irrupción de The&Partnership en nuestro país, supuso una verdadera revolución disruptiva, eliminando de una vez por todas los silos entre los actores que conforman el ecosistema de comunicación publicitaria.
Habiendo podido vivir el &Model en primera persona, te das cuenta de que algo que parecía imposible de integrar: los medios, la creatividad y la producción, las necesidades de negocio de nuestros clientes y las nuestras propias…en realidad ya se está haciendo en España, gracias a una re-educación en valores de cohesión, empatía, escucha activa y esfuerzo diario de cada uno de los perfiles especializados.
Esto nos permite unir o hibridar lo mejor de dos mundos: la agilidad y flexibilidad que permiten una visión holística común, con un equipo dedicado; y el acceso al talento y las herramientas, escalas y datos, que solo un grupo de comunicación mundial (como es WPP) puede ofrecer.
Cuando los esfuerzos se centran de manera conjunta en buscar la mejor manera de llegar a cada persona en todo el ciclo de comunicación, desde la estrategia, contenidos, creatividad, media, producción, etc. y cuando esto lo hacemos además en colaboración estrecha y constante con los anunciantes, teniendo siempre sus necesidades de negocio como mapa de carretera, el modelo híbrido integrado surge como respuesta casi natural.
El &Model da pie a estructuras más horizontales, donde cada integrante del equipo tiene un rol imprescindible para la consecución del éxito global del servicio que ofrecemos. Esto favorece a la construcción entre todos y, no de manera impuesta, de una cultura interna ágil, y flexible que minimiza la figura del “gurú” y ayuda a interiorizar la necesidad de colaboración.
Modelo híbrido
Esta base de trabajo híbrida, en la que la creatividad y los medios se funden en una sola dirección, bajo el paraguas de una dirección estratégica conjunta con la audiencia como foco y cerrando el arco con la integración de la fase de producción, deja huella de su fortaleza cuando la enfrentamos adicionalmente a los constantes cambios y demandas sociales que hemos vivido en los últimos años: la aceleración de la información, la digitalización a marchas forzadas, los constantes retos tecnológicos y la irrupción de una pandemia de escala global en nuestras vidas.
A lo que nosotros ya llamábamos modelo híbrido, se le suma esta doble vuelta de tuerca. El mundo evoluciona y nosotros con él, adoptando tras los meses de confinamiento y teletrabajo obligado, una nueva metodología (que podríamos llamar doble hibridación), apoyada en todo lo que ya habíamos construido previamente: una innovadora forma de pensamiento que optimiza el proceso y eficiente los resultados.
Esta decisión busca combinar lo mejor de dos propuestas radicalmente opuestas: presencialidad total VS. trabajo 100% en remoto. Los datos contradictorios que reflejan estudios sobre esta temática, como el de Microsoft, en el que se estipulaba en 2021, que “más del 70% de los emplea dos quieren que las opciones de trabajo remoto continúen de al guna forma tras el fin de la pandemia. Mientras que en el sentido opuesto, el 65% afirma necesitar más tiempo en persona con sus equipos” reflejan ya no la importancia, sino directamente la necesidad de dar respuesta a estas inquietudes sociales.
Nuestro negocio se basa en añadir capas de valor, y ese valor viene dado principalmente por las personas. Proporcionar esa flexibilidad laboral de la semi-presencialidad ayuda a mejorar no solo la calidad de vida de los trabajadores y por consiguiente su estado de ánimo y capacidad de conciliación, lo cual siempre tiene un reflejo positivo a nivel de involucración, inspiración y productividad, sino que también proporciona a la agencia herramientas muy potentes para la retención y atracción de talento.
Yo, personalmente, soy de las que estaba esperando volver a encontrarme con mis compañeros, ya que nuestra forma de trabajo exige una compenetración plena, no solo con las personas más cercanas del equipo nuclear (en mi caso el resto de los componentes del área de cuentas de la parte creativa) sino con el resto de personas que sacan adelante cada proyecto y esto no siempre es fácil conseguirlo de forma remota.
El hecho de tener acceso a la doble hibridación equilibra para mi la posibilidad de estrechar lazos de manera constante con mis compa ñeros, lo cual que cobra especial importancia a la hora de enfrentarse a retos como reestructuraciones, salidas y entradas de nuevas figuras o peticiones especialmente complejas por parte de los clientes; pero dejando espacio a una cierta independencia, fundamental para el desarrollo personal.
Para poder materializar esta visión, es necesario primero establecer un objetivo común y cambiar el chip. Hay que buscar desprenderse del antiguo foco, que en el pasado tendía bien hacia una creatividad recubierta de espectacularidad, pero que no siempre se apoyaba de manera profunda en la investigación y el alcance adecuados, o bien a la búsqueda de una eficiencia máxima en las estrategias de medios, sacrificando muchas veces por el camino la excelencia creativa. Ese nuevo foco, en The&Partnership apostamos por ponerlo en los verdaderos protagonistas de nuestra industria: la audiencia.
Texto de Elena Florenty, account manager de The&Partnership.
