Todos con Obama

La campaña propiamente dicha empezó dos años antes de la elección, que tuvo lugar el 4 de noviembre del 2008,

La campaña propiamente dicha empezó dos años antes de la elección, que tuvo lugar el 4 de noviembre del 2008, y costó 750 millones de dólares, obtenidos íntegramente mediante donaciones de particulares.

Desde el punto de vista estratégico, la campaña se apoyó sobre tres pilares fundamentales: la idea del cambio, la economía y la captación de votantes. Según Margolis: “Queríamos ser los dueños de la idea del cambio frente a la campaña de su rival en las primarias, la candidata Hillary Clinton, que hablaba de experiencia”.

Desde el punto de vista táctico, los responsables de la campaña se marcaron los siguientes objetivos: ampliar el radio de influencia mediante la visita a más estados y ciudades; ampliar el electorado mediante la incorporación de nuevos votantes; aprovechar la tecnología y, en especial, Internet