Hace poco leía un artículo donde se nos invitaba a reflexionar sobre qué es lo importante cuando hablamos de un negocio. Y lo resumía en una sola idea: tener claro tu propósito. Hacer de él tu mantra, lograr que todos los miembros de la organización lo tengan presente y que cualquier decisión que tomemos vaya precedida de una respuesta afirmativa a la siguiente pregunta: ¿Está alineada con mi propósito?
La idea de tener claro cuál es tu propósito se puede aplicar a cualquier organización. Y creo que esa visión de lo que somos como entidad es lo que, de forma inalterable, tiene que resumir el futuro de nuestra asociación, el Clúster de Comunicación de Galicia. Pero no por ello es fácil. Siempre pienso que las entidades sin ánimo de lucro se nutren del esfuerzo de muchas personas que suman sin pedir nada a cambio, que quieren aportar con generosa dedicación, por multitud de razones, pero casi siempre a costa de muchas horas de dedicación que no siempre son recompensadas. Las personas que tenemos la oportunidad de hacer cosas para los demás, tenemos simplemente el deber moral de hacerlo. No puede ser que todo recaiga en el Estado.
La sociedad necesita de un relato positivo, y este debe provenir de la comunicación, esa arma poderosa que tenemos a nuestra disposición. Es a través de ella que podemos transmitir nuestros pensamientos, nuestras inquietudes y nuestras demandas. Es a través de la comunicación que podemos construir puentes, derribar barreras y construir un mundo más inclusivo y justo, cuidando nuestros principios y valores.
La sociedad necesita de un relato positivo y este debe provenir de la comunicación, esa arma poderoso que tenemos a nuestra disposición
El propósito de nuestra organización está claro. El cómo hacerlo puede ser la interrogante, puesto que el camino admite muchas variantes. En cualquier caso, nuestra obligación se basa en tres pilares fundamentales.
El primero, seguir aunando al sector y hacer partícipe a más entidades y empresas para generar visibilidad de nuestros asociados. El segundo, colaborar con nuestras asociaciones integrantes, para crear un hábitat de encuentro y poner en valor las capacidades de sus miembros, potenciando al sector de la comunicación; y tercero, honrar los logros del presente a fin de ser fuente de inspiración para las generaciones futuras de comunicadores. Al celebrar la excelencia, se envía un mensaje claro de que la comunicación es una fuerza poderosa que puede ser promotora del cambio. Además, muestra a los jóvenes talentos que no es necesario estar en una gran metrópolis para destacar en la comunicación, y que las historias significativas pueden surgir desde cualquier rincón del mundo.
Los Premios Paraugas
Los Premios Paraugas son una celebración de la excelencia en la comunicación en todas sus formas. Desde periodismo hasta marketing, desde publicidad hasta relaciones públicas, diseño e impresión… estos premios destacan la labor excepcional de aquellos que se esfuerzan por contar historias, compartir información relevante y dignificar su profesión diariamente. Reconocer y premiar esta labor es esencial para inspirar a otros a seguir un camino de calidad y profesionalismo en la comunicación.
Además, los premios son un remedio terapéutico. Cuando escucho hablar bien de alguien siempre merece mi atención y reconocimiento. Practicar el asociacionismo no deja de ser una terapia para hablar de nuestros compañeros de profesión desde la admiración y el afecto.
Un camino con retorno
No hay nada que genere mejor retorno que invertir tu tiempo y esfuerzos en tu sector, no digamos si son tus primeros años de carrera. Solamente por aprender y divertirte, con valentía de ponerte a hacer cosas sin tener claro cuál puede ser el retorno. Es fundamental que las personas que formamos parte del sector de la comunicación y la industria creativa, tomemos conciencia de nuestro papel como comunicadores. Todos tenemos un papel que desempeñar. Cada uno de nosotros tiene la capacidad de influir en nuestro entorno, de promover el cambio a través de nuestras conversaciones diarias, nuestras interacciones en las redes sociales y nuestras acciones cotidianas.
Suele decirse que importa en primer lugar saber a dónde queremos ir. Sin embargo, no es menos importante conocer dónde estamos y quiénes somos. El hecho de estar unidos supone que ya nos hemos situado en condiciones de caminar juntos, en condiciones de proseguir la travesía conjuntamente, sin exclusiones. El futuro está en nuestras manos, y podemos crear un relato bonito; y muy positivo.