El social media marketing se está convirtiendo en una opción de primera línea para los anunciantes de todo el mundo. En 2019, la inversión publicitaria destinada a redes sociales será de 55.000 millones de dólares, superando a la recibida por los periódicos impresos, que tendrán que sobrevivir con 50.000 millones de dólares.
De hecho, el social media marketing es uno de las disciplinas digitales que más crece, con unos incrementos en inversión publicitaria del 51% en 2016 y una tasa promedio del 20% anual hasta 2019.
Por el contrario, y según las previsiones globales de Zenith, la publicidad en periódicos (ediciones impresas) sigue cayendo a un ritmo del 5% anual, al mismo ritmo que sus ventas. Desde 2007, año en el que la prensa alcanzó su máximo histórico de inversión publicitaria (113.000 millones de dólares), no ha parado de caer y en 2019 estará en las mismas cotas que tenía en el año 1985.
SE RALENTIZA INTERNET
La inversión publicitaria global en digital crecerá un 13%, alcanzando los 205.000 millones de dólares en 2017, lo que supone el 36,9% del total de la tarta publicitaria mundial, frente al 34,0% de 2016.
Este será el primer año en el que los anunciantes habrán destinado más presupuesto publicitario a Internet que a la televisión tradicional (que en total asciende a 192.000 millones de dólares).
La magnitud de la publicidad en Internet hace que su tasa de crecimiento se haya ralentizado. Los ingresos publicitarios de la Red aumentaron un 17% en 2016, frente al 20% en 2015. Las previsiones de cara a este año hablan de un 13%, que se convertirá en un 12% y un 10% en 2018 y 2019. Con todo, el soporte seguirá sumando cifras cercanas a los 25.000 millones de dólares al año.
Ante esta perspectiva, los expertos recomiendan tanto a las plataformas como a los editores digitales dar respuesta a las inquietudes de los anunciantes sobre la visibilidad y la seguridad de las marcas en la Red. A medida que el mercado madura, los anunciantes necesitan ( y exigen) saber con certeza que sus anuncios están siendo vistos activamente por personas reales en entornos apropiados.