
Es una tendencia global impulsada por los anunciantes y las marcas, cada vez más preocupados por todo lo que tenga que ver con la brand safety, y los medios procedentes del papel, interesados en conservar y rentabilizar su buen posicionamiento en términos de credibilidad y consumo.
El tradicional paradigma de la publicidad programática, impactar al usuario oportuno en el momento oportuno, se enriquece con una tercera condición: impactar también en el entorno oportuno.