Y si no, que se lo pregunten a la compañía aérea Ryanair, que de nuevo está de candente actualidad. Siempre se ha dicho que lo importante es que hablen de uno, aunque sea mal, pero, sinceramente, no creo que ésta sea una buena política a seguir. Existen estrategias mucho más elaboradas, menos vulgares, sin caer en la provocación y ¡sin acumular denuncias! Qué pronto le van a hacer competencia a estos programas de corazón, que te bombardean a todas horas, que en lugar de informar, parece que se disputan el título de el más denunciado.
Imagino que sabréis la última provocación de Ryanair. Han utilizado la imagen del presidente francés, Sarkozy, con su nueva compañera sentimental, Carla Bruni, para su última campaña publicitaria. Dice que con Ryanair el presidente podrá contar con toda su familia en su boda, ésta se une a otras perlas que nos ha regalado la compañía aérea, como la referencia a Zapatero y su cheque bebé, la aparición de los líderes polacos…
Los resultados se repiten: denuncias de los afectados y la posterior retirada del anuncio, a ver qué sucede con éste, creo que no me equivocaré al predecir su pronta retirada. Se está convirtiendo en un bucle infinito, que termina por cansar.
Y yo me pregunto, ¿qué está pasando? ¿se está dejando la creatividad de mano del sensacionalismo? La creatividad busca un valor añadido, ese algo diferenciador, un estilo que lo haga único… ¿y la autenticidad va de la mano de la demagogia? Espero que no. Además, ¿de verdad creéis que se va a vender más de este modo? Su clave son los económicos precios que ofrecen, para qué meternos en otras dinámicas menos refinadas.
(*) Rafael Muñiz es director general de Rmg (www.rmg.es), empresa especializada en marketing y ventas inteligentes, y profesor de Marketing de CEF.