Tras más de dos años de pandemia mundial, la economía se ha visto interrumpida. Una situación que se ha consolidado con el aumento de la inflación y el estallido del conflicto bélico en Ucrania. Así, la confianza en todo el mundo se ha visto quebrada al existir interrupciones en las cadenas de suministro, como en la energía, los cereales, la carne o los lácteos.
Todos estos problemas sumados a la larga duración de la crisis han provocado un empeoramiento de la brecha económica con un consumo polarizado y dividido en hábitos de compra que esperan que se normalice. Lo cierto es que gracias a los trastornos sufridos, los consumidores se han visto obligados a reevaluar aquello que les importa.
Bajo esta premisa, NielsenIQ ha conseguido identificar cinco nuevos tipos de consumidores en España: luchadores (14%), recuperados (15%), cautos (52%), estables (16%) y prósperos (4%).
Cinco grupos nuevos de consumidores
- Luchadores: aquellos que experimentaron inseguridad financiera durante la Covid-19 y que, aún, continúa en la actualidad.
- Recuperados: tuvieron inseguridad financiera durante los años de la pandemia, pero han vuelto a la normalidad.
- Cautos: no han sufrido el impacto en su seguridad financiera, pero siguen siendo cautelosos con el gasto.
- Estables: no han mostrado ningún impacto en sus finanzas y además han seguido gastando como siempre.
- Prósperos: ahorraron dinero durante la pandemia y ahora se sienten más seguros financieramente que antes del inicio de la Covid-19.
Estrategias para controlar el gasto
Concretamente un 52% de los habitantes en España pertenecen al grupo de los cautos. Se trata de un dato significativamente superior al de la media mundial que se sitúa en 38%. Además, en cuanto a las estrategias para controlar el gasto, los españoles optan por las marcas de distribución (para el 27% de los encuestados) y controlar el coste total (opción escogida por el 26%).
Del mismo modo, un 23% de los españoles reconoce que compra cualquier marca que esté en promoción; seguido de un 22% de ellos que aseguran escoger el producto de menor precio dentro de la categoría que buscan; con el mismo porcentaje, un 22%, garantizar esperar a que sus productos preferidos estén en promoción para comprarlos.
Españoles fanáticos de las tiendas físicas
La pandemia ha favorecido el aumento de las compras online. Gracias a ello, un 30% de los consumidores españoles se consideran multicanal, —compran en comercios tanto online como físicos—. A pesar de ellos, esta cifra todavía se encuentra lejos de la media mundial (en torno al 49%).
Eso sí, en España continúa existiendo un fanatismo por realizar compras de forma presencial. De este modo, la compra física sigue ganando la partida con un 64% de los consumidores que se declaran fan de este canal frente al 42% a nivel mundial.
“Dado que los comportamientos de los consumidores siguen estando muy polarizados, es fundamental que los minoristas y los fabricantes se adapten junto a las cambiantes preferencias de los consumidores. Esto debe hacerse reinventando las gamas de surtido y estableciendo nuevas estrategias para dar respuesta a las nuevas necesidades, preferencias y prioridades de este panorama de consumo dividido”, afirma Patricia Daimiel, directora general para el sur de Europa de NielsenIQ.