El reto para Mateo&co, agencia encargada del proyecto, ha consistido en mantener la esencia elegante de la marca ganando potencia y volverla más reconocible sin perder su aura de misterio. El objetivo: destacar en el lineal.
El rediseño ha afectado a tres elementos de la marca. Por un lado, la corona se ha simplificado eliminando grafismos y consiguiendo un tono más simplista y contemporáneo. Tanto la corona como la “O” característica de Nordic se han convertido en los elementos gráficos protagonistas del logotipo de la marca.
Por último, los colores no han sido cambiados pero sí la manera en que se han utilizado a fin de dotar a la marca de más personalidad y presencia.