La adjudicación se ha producido en el marco del proceso de reordenación de todas las marcas de Telefónica, fruto de la nueva estrategia adoptada por la compañía, y por el que Movistar y O2 capitalizarán el catálogo comercial (telefonía fija y móvil o banda ancha) en todo el mundo. La marca Telefónica se reserva como emblema corporativo e institucional para la comunicación con accionistas, empleados y sociedad en general.
El concurso de la cuenta institucional de Telefónica se resolverá a finales de este mes.