Microsoft pagará 5.440 millones de euros (7.200 millones de dólares) por la compra de la división de dispositivos móviles y las patentes de Nokia, en la práctica la absorción total de la compañía escandinava.
La compañía con sede en Seattle pagará 3.790 millones de euros por la unidad de fabricación de móviles, cada vez más rezagada frente a sus competidores, y 1.650 millones de euros por la cartera de patentes de Nokia.
El comunicado detalla que el consejero delegado de Nokia, Stephen Elop, abandona su puesto, con lo que se ejecutará de este modo la toma de control total de Nokia, una empresa que fue número uno en la venta de móviles a nivel mundial pero que ha perdido terreno en los últimos años frente a los smartphone de Apple o la surcoreana Samsung.
Ambas multinacionales esperan que la transacción quede completada en el primer trimestre de 2014, después de la aprobación por parte de los reguladores estatales y los accionistas.