El aumento del consumo de contenidos snack-sized está popularizando los microanuncios de vídeo, especialmente en las pantallas pequeñas y entre los millennials. Son especialmente eficaces para aumentar la notoriedad y transmitir la imagen de marca.
Sin embargo, para ser eficazmente persuasivas e impulsar la intención de compra son necesarios al menos 15 segundos. Así lo refleja un estudio realizado por YuMe e IPG Media Lab que ha evaluado el impacto de los anuncios de vídeo digitales según su duración.
Los cambios en el consumo de contenido de vídeo están haciendo que las compañías modifiquen las estrategias de publicidad de vídeo y se enfrenten a una creciente complejidad de lo que funciona mejor y peor según el objetivo de cada momento.
Las principales conclusiones del estudio son las siguientes:
• Los anuncios funcionan de manera distinta en función de su duración, por lo que es fundamental desarrollar una estrategia creativa según la duración de la publicidad .
• Los microanuncios tienen una ventaja en las pantallas más pequeñas, donde el vídeo ocupa el 100% de estas y el contenido breve es lo habitual.
• Los millennials, al estar habituados al contenido breve, ya que han crecido con él, responden mejor a los microanuncios, y tienden a tener mayor predisposición a ver publicidad de mayor calidad y entretenimiento, que los consumidores de generaciones anteriores.
• Los anuncios más cortos pueden servir como un recordatorio rápido para impulsar la notoriedad de marcas establecidas. Por su parte, la publicidad más larga es más idónea para educar acerca de una nueva marca.
• Mientras que cada dispositivo funciona de manera diferente, en las métricas de persuasión se mantiene el límite de los 15 segundos para obtener un impacto.
A tenor de estas conclusiones, los responsables del estudio aconsejan a los anunciantes implementar estratégicamente diferentes duraciones de anuncios de vídeo a partir de las necesidades individuales de todas las marcas del portfolio.