La Real Sociedad Canina de España lanza una campaña de concienciación sobre la importancia de conocer las responsabilidades a las que se enfrentan todos los que quieren acoger en sus hogares un perro. Auspiciada por la frase ‘Más que un regalo, uno más de la familia’, esta iniciativa plantea que no hay que tratar a los animales de compañía como obsequios, sino como un miembro más de la familia en el momento en el que se acoge.
Según los datos establecidos por la RSCE gracias a un informe elaborado por la Fundación Affinity, el 9,1% de los perros llegaron a centros de acogida el año pasado por ser perros abandonados. Por ello, es necesario recordar la importancia que tiene una decisión como la de acoger a estas mascotas que tantos buenos momentos generan, pero que también traen consigo una serie de responsabilidades. En esta línea, de los 288.000 animales recogidos por protectoras, 170.000 eran perros, lo que supone el 59% del total.
La pérdida de interés y los problemas de comportamiento del animal están entre las principales causas de abandono. De estas cifras, sólo un 27% son de raza y el resto de perros abandonados son mestizos. En este sentido, las razas puras conciben una serie de comportamientos que ya son asimilados por los dueños.
Primeras navidades con la Ley de Bienestar Animal
Las navidades de 2023 serán las primeras con la Ley de Bienestar Animal que considera una falta grave los abandonos de los animales con una multa entre 10.000€ y 50.000€. Además, esta ley establece que un perro puede pasar como máximo 24 hrs solo para que no sea considerado abandono.
Por lo tanto, no es conveniente llevar un perro a casa por simple capricho o impulso y hay que tener en cuenta las responsabilidades y gastos que supone este ‘regalo’. Adoptar un perro supone 1.25 euros de media anuales, según la RSCE. Por ello, es conveniente dejarse asesorar por criadores, quiénes pueden dar las indicaciones sobre si el hogar y el estilo de vida son convenientes para un perro que quiera ser adoptado.
“Los criadores responsables ejercen una gran labor educativa a quienes deciden incorporar un perro a su día a día. Su labor es indispensable para el bienestar animal siempre, pero en épocas como las Navidades, cuando crece la llegada de perros a los hogares, doblan su compromiso contra el abandono. Su fin último es vaciar las perreras desde fuera», concluye el presidente de la RSCE, José Miguel Doval.