Según Marta Aguirrezabal, «el anunciante está reclamando soluciones, vengan de donde vengan. La fidelidad ha muerto, por mucho que nos duela. En China apostamos por la fórmula del trabajo por proyecto – entendido de una manera amplia – porque nos parece que es la mejor forma de resolver los problemas que hoy tiene el anunciante”. A su vez, Rafa Antón señala que “es comprensible que las agencias se resistan a aceptar esta realidad debido a sus estructuras, herederas de otros tiempos. “Nosotros tenemos la suerte de nacer ahora. Y sería suicida montar un negocio en base a la nostalgia o a cómo desearíamos que fueran las cosas en lugar de hacerlo en base a la realidad del mercado y a lo que los anunciantes llevan practicando de facto varios años”.
En este sentido ambos defienden que trabajar por proyecto garantiza que el problema del anunciante está siempre en el centro de toda la actividad, así como una intensidad que generalmente sólo se vive en las agencias durante un concurso o en algunos proyectos muy determinados. No obstante, ambos profesionales ven perfectamente compatible este modelo con el de las ideas y las estrategias de largo recorrido. Todo depende de cada proyecto.
Entre los objetivos de China también está el de trabajar con clientes diferentes al anunciante tradicional y colaborar con agencias de medios o con otras agencias de publicidad. De momento, la nueva agencia ya está en conversaciones muy avanzadas para manejar un proyecto global desde Londres. Así mismo, China cuenta con una serie de alianzas estratégicas entre las que destaca el acuerdo con una consultora de nuevas tecnologías y entretenimiento con base en Tokio y en Los Ángeles
El equipo inicial de China es marcadamente senior (Aguirrezabal y Antón tienen más de 20 años de experiencia en el sector) y se compone de ocho personar en el área estratégica y de creación.
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