Son unos premios organizados por el Ministerio de Ciencia e Innovación y Barcelona Centro de Diseño. Con este motivo hemos hecho unas preguntas a Conrad Llorens, fundador y consejero delegado de Summa.
Summa es conocida sobre todo como consultora de branding, más que como empresa de diseño, y normalmente el Premio Nacional de Diseño se adjudica ad personam, a un diseñador individual y a una empresa usuaria del diseño. ¿Por qué el cambio en este edición?
Fundamos Summa en 1989 con el convencimiento de que las empresas e instituciones necesitaban respuestas más especializadas, integradas e integrales para crear y gestionar sus marcas. Y para llevar a cabo esta labor constituimos una unidad conceptual y de gestión, formada por un equipo multidisciplinar con capacidad tanto estratégica como creativa y con una visión y capacidad de respuesta global.
El diseño es una de las herramientas fundamentales con las que trabajamos, por su capacidad para generar percepciones, provocar sensaciones, visualizar la estrategia corporativa y tangibilizar una experiencia… Sin embargo nosotros nunca nos hemos considerado una empresa de diseño, porque para nosotros el diseño no es un fin en sí mismo, sino un instrumento para generar una experiencia de marca coherente desde una perspectiva multicanal (soportes gráficos, físicos, audiovisuales, interactivos